Economía
Dinero

Prepárate para la posible recesión de 2025: el dinero exacto que deberías tener ahorrado

La cantidad ahorrada que recomiendan los expertos y que deberías tener en tu cuenta de ahorro

El truco de Lidl con el que podrás ahorrar un pastizal en tu compra

Esto es lo que va a pasar con tus ahorros del banco si estalla la guerra

Muchas son las señales de incertidumbre económica que parecen pulular a nuestro alrededor. Y no sólo debido a las tensiones geopolíticas crecientes y los anuncios de nuevas medidas arancelarias entre potencias mundiales. Incluso algo puntual, como el apagón del pasado 28 de abril, crea tensión a muchas personas, especialmente a nivel económico. Entonces, con ese miedo a perder dinero o pasarlo mal económicamente y con la posibilidad de que se produzca una recesión global, nunca está de más estar preparados y saber, cuánto dinero deberíamos tener ahorrado.

Cuando pensamos en recesión, España no es ajena a la situación.  Aunque el país había conseguido cierta estabilidad tras los embates económicos de los últimos años, el Banco de España ya ha advertido que revisará a la baja sus previsiones de crecimiento para 2025. Factores como los nuevos aranceles aplicados por Estados Unidos o el impacto de fenómenos meteorológicos extremos, como la reciente DANA, podrían alterar el equilibrio económico que muchos hogares apenas estaban empezando a recuperar. En este escenario, una de las recomendaciones más repetidas por expertos en finanzas personales es contar con un fondo de emergencia. No se trata de ser alarmistas, sino de actuar con previsión. Tener un colchón económico puede marcar la diferencia entre capear una tormenta financiera o verse obligado a tomar decisiones precipitadas. Y aunque hablar de ahorro en tiempos de inflación y sueldos ajustados puede parecer una utopía, lo cierto es que con un poco de estrategia se puede construir una base sólida para afrontar lo que venga.

Ante una posible recesión, éste es el dinero exacto que deberías tener ahorrado

Desde hace meses, las alarmas económicas suenan en distintos frentes. La guerra en Ucrania continúa sin un desenlace claro, las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China vuelven a escalar, y los efectos del cambio climático, como los temporales o las sequías prolongadas, ya no son eventos aislados. El apagón del 28 de abril, que dejó a miles de personas sin electricidad durante horas, ha servido como un recordatorio de que la infraestructura y la economía están más conectadas de lo que parece.

Además, el giro proteccionista en la política comercial de EE. UU., con nuevos aranceles que podrían afectar a las exportaciones europeas, ya está generando un efecto dominó. El Banco de España, en su último comunicado, confirmó que revisará sus proyecciones económicas para el próximo año, anticipando una posible ralentización del crecimiento. En resumen, aunque no se ha declarado una recesión formal, sí se están alineando varios factores que podrían desembocar en una crisis.

¿Cuánto dinero deberías tener ahorrado?

Según los especialistas, el fondo de emergencia ideal debería cubrir entre 3 y 6 meses de gastos esenciales. No se trata sólo de acumular dinero por acumularlo, sino de tener una red de seguridad para imprevistos como una pérdida de empleo, una bajada de ingresos o gastos inesperados en un contexto adverso. Para muchos hogares en España, esto equivale a tener entre 8.000 y 16.000 euros disponibles, una cantidad que puede parecer inalcanzable a simple vista.

Sin embargo, otros expertos plantean una visión más flexible. El autor Ramit Sethi propone centrarse en los gastos mínimos imprescindibles, es decir, calcular cuánto necesitas realmente para mantener las luces encendidas. Esto incluye alquiler o hipoteca, comida, suministros y poco más. Si te centras en ese nivel de gasto, el colchón puede reducirse considerablemente y volverse más asumible.

Cómo empezar a construir tu fondo de emergencia

Uno de los errores más comunes es pensar que hay que tener el fondo completo desde el primer día. Nada más lejos de la realidad. La asesora Andrea Woroch aconseja fijar una primera meta de 1.000 euros, una cifra asequible que permite empezar sin agobios. A partir de ahí, se puede ir ampliando progresivamente, ajustando las cantidades a los ingresos y a la situación personal de cada uno.

El truco está en identificar dónde están los verdaderos márgenes de ahorro. Jeremy Schneider, creador del Club de Finanzas Personales, señala que muchas personas se centran en recortar suscripciones o gastos menores, cuando en realidad los cambios más efectivos suelen estar en las grandes partidas: vivienda, transporte, alimentación. Por ejemplo, plantearse compartir piso, vender un coche que apenas se usa o mudarse a una zona más asequible puede liberar cientos de euros al mes.

Pequeños pasos que marcan una gran diferencia

Ahorrar no significa vivir con miedo o privarse de todo. Se trata de adoptar una mentalidad previsora, entender que el futuro puede traer sorpresas (no siempre positivas) y prepararse para ellas. Empezar por revisar tus gastos mensuales, eliminar lo innecesario y automatizar un pequeño ahorro cada mes puede ser el primer paso hacia una seguridad financiera real.

Además, tener un fondo de emergencia no sólo aporta tranquilidad económica, sino también emocional. Saber que tienes un respaldo en caso de dificultad reduce el estrés y te permite tomar decisiones con mayor claridad, sin caer en el pánico.

Que duda cabe que no podemos controlar las guerras, los aranceles internacionales ni las catástrofes naturales. Pero sí podemos controlar cómo nos preparamos para sus posibles consecuencias. La posible recesión de 2025 no es una certeza, pero los indicios están ahí y conviene no ignorarlos. Empezar a construir un fondo de emergencia, por pequeño que sea, es un acto de responsabilidad y de inteligencia financiera. Porque al final, más allá de las cifras, lo importante es tener la capacidad de responder con calma y recursos ante lo inesperado.