Economía
OCU

La OCU lo confirma: ésta es la única mantequilla saludable que puedes comprar en el supermercado

La mantequilla de la marca Únicla es la de mayor calidad según la OCU

La mantequilla es uno de esos productos que pasan desapercibidos en la cesta de la compra, pero que tienen mucho más detrás de lo que parece a simple vista. Se usa a diario en muchos hogares, ya sea para untar en el desayuno o como base de recetas tradicionales, y de hecho, forma parte del sabor de siempre. Sin embargo, debemos tener cuidado a la hora de elegirla, ya que no todas las mantequillas son iguales, y seleccionar una que sea de calidad puede marcar una gran diferencia tanto en sabor como en salud.

Como decimos, es un ingrediente o alimento popular, pero también es cierto que siempre ha estado en el foco debido a su contenido en grasas saturadas. Se recalca entonces la importancia de elegir una mantequilla que sea de buena calidad y que tenga un buen perfil nutricional, evitando aquellas que tengan  aditivos, conservantes y hasta azúcares añadidos. Por eso, saber leer la etiqueta y conocer su procedencia se ha vuelto fundamental, junto al hecho de contar con estudios como el que ha hecho la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) en torno a la mantequilla. El análisis muestra una comparativa entre 63 marcas, a las que se les ha evaluado el sabor y la textura, así como la composición y el impacto medioambiental. Y el resultado ha sido revelador: sólo una se salva con buena nota.

Esta es la única mantequilla saludable según la OCU

Del estudio sobre la mantequilla realizado por la OCU y centrado en 63 marcas que podemos encontrar en el supermercado, sólo una destaca de forma más que evidente y seguramente, para muchos consumidores no es de las más populares. Sin embargo, sí que es la mejor de todas las que podemos comprar gracias a su composición natural y su respeto por el bienestar animal.

Se trata de la mantequilla Únicla, de la que la OCU destaca que no contiene aditivos ni conservantes, y proviene de leche de vacas criadas en granjas certificadas, lo que la convierte en una opción más sostenible y respetuosa con el medio ambiente. Además, su contenido graso es del 82%, en línea con lo que se espera de una mantequilla de alta calidad.

Lata de mantequilla Únicla.

Una joya nutricional (y también de sabor)

Más allá de su buena ficha técnica, la mantequilla Únicla ha sido reconocida además con el International Taste Award, un premio que no sólo tiene en cuenta el contenido nutricional, sino también la textura, el sabor y la experiencia en boca. Cremosa, fácil de untar y con un sabor suave pero presente, ha convencido tanto a expertos como a consumidores.

Su contenido en sal es muy bajo (solo 0,1%), no lleva azúcares añadidos y aporta una buena dosis de ácidos grasos esenciales, como el omega-3 y el omega-6, que ayudan a mantener sano el corazón, el cerebro y el sistema inmunológico.

¿Dónde se puede comprar?

Aunque no es una mantequilla barata, su calidad parece justificar los más de 5 euros por 250 gramos que cuesta. Está disponible en tiendas como El Corte Inglés, Hipercor y Alcampo, o también la tenéis en Ahorramás y en Amazon (además en estas dos últimas opciones a un precio de 4,39 euros).

La trampa de las mantequillas ligeras

Uno de los aspectos más reveladores del informe de la OCU es que las versiones light no son necesariamente más sanas. Aunque tienen menos grasa, suelen incorporar una larga lista de aditivos (emulsionantes, espesantes, colorantes) para imitar la textura de una mantequilla tradicional. En términos nutricionales, el cambio es más cosmético que real.

De hecho, el NutriScore de muchas de estas variantes sigue situándolas en los peores niveles de la escala, entre la D y la E, debido a su alto contenido en grasas saturadas y, en algunos casos, también en sal.

¿Cómo saber si una mantequilla es buena?

La clave está en mirar la etiqueta. Una mantequilla de calidad debe tener un contenido en grasa superior al 80%, pocos ingredientes (idealmente solo nata o crema de leche y, como mucho, sal), y carecer de aditivos innecesarios. También hay que tener en cuenta su textura y su facilidad para untar, algo que depende tanto de su composición como de su proceso de elaboración.

Según la OCU, conviene evitar aquellas que lleven azúcares añadidos o mezclas con aceites vegetales, ya que estos ingredientes no solo bajan la calidad del producto, sino que lo alejan de su esencia original.

Un consumo con cabeza

En cualquier caso, la mantequilla es un alimento que debe tomarse con moderación. Aunque es natural y tiene vitaminas como la A y la D, también contiene colesterol (unos 250 mg por cada 100 g) y grasas como el ácido palmítico o butírico, que en exceso pueden afectar la salud cardiovascular.

Por eso, los expertos coinciden: lo ideal es no consumirla a diario y, cuando se haga, optar por las mejores versiones del mercado. Y si es para el desayuno, siempre se puede alternar con otras grasas saludables como el aceite de oliva virgen extra, más común en la dieta mediterránea y con beneficios contrastados.