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La OCU confirma: ésta es la provincia de España dónde la compra es más barata

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

Desde el último análisis de la OCU, los precios de los productos que componen la cesta de la compra OCU han aumentado en un 3,5 % de media, lo que, aunque es un incremento menor que en años anteriores, sigue sumando a un aumento acumulado del 35,5 % desde 2021. Esta subida ha erosionado el poder adquisitivo de las familias, impidiendo que recuperen niveles anteriores a la crisis de 2008. En 2024, el 63 % de los productos han visto un incremento en sus precios, aunque las categorías de droguería e higiene presentan subidas más moderadas y también algunas bajadas.

Entre los productos que más han encarecido su precio destaca el aceite de oliva virgen extra, con un incremento del 80,2 %. Otros productos como el zumo de naranja Don Simón y los plátanos de Canarias han aumentado un 47,3 % y un 38,5 %, respectivamente. Por otro lado, algunos productos han bajado de precio, siendo el aceite de girasol el que más lo ha hecho, con un descenso del 23,1 %. En general, los productos de marca han incrementado su precio en un 3,8 % frente al 2,8 % de las marcas blancas. Esta situación ha llevado a muchos hogares, especialmente aquellos con menos recursos, a adaptar sus hábitos de compra, aumentando el consumo de productos más económicos.

La provincia donde la compra es más barata según la OCU

La OCU ha llevado a cabo un exhaustivo análisis de 1.070 supermercados en 65 ciudades de España, evaluando cuatro tipos de cestas de la compra.

La cesta fresca incluye solo alimentos frescos, la cesta de marcas analiza productos de marcas líderes, la cesta económica incluye los productos más baratos, y la cesta OCU, que busca asemejarse a una compra común, integra 238 productos de diversas categorías. Los resultados del informe muestran que, de cada tres productos analizados, dos han subido de precio, aunque ya comienzan a verse algunas bajadas.

En cuanto a los supermercados, el más barato de España se encuentra en Barcelona, específicamente el Alcampo en la Avenida Diagonal, que lidera la lista en todas las categorías analizadas. Alcampo tiene un posicionamiento destacado, con ocho de sus establecimientos en el top 10 de los más económicos, mientras que las tiendas de la cadena Sánchez Romero son las más caras. A nivel general, la cadena Dani, que opera sólo en Granada y Jaén, es la más económica en términos de precio medio, seguida por Tifer en Castilla y León.

Cesta de la compra

La OCU calcula que el coste medio anual de la cesta de la compra en España asciende a 6.342 euros. Sin embargo, la diferencia de precios entre el supermercado más caro y el más barato puede alcanzar hasta 1.272 euros anuales, una diferencia que depende mucho de la ciudad.

Por ejemplo, en ciudades como Barcelona y Madrid, esta diferencia es notable, mientras que lugares como Ciudad Real presentan precios más homogéneos. Zamora y Teruel son reconocidas como las ciudades más baratas para hacer la compra, seguidas por Jerez, Lugo y Vigo.

En Galicia, que se posiciona como la comunidad autónoma más económica, los supermercados Alcampo en Vigo destacan por sus precios bajos, mientras que El Corte Inglés en La Coruña y Supercor en Pontevedra son los más caros de la región.

En resumen, el análisis de la OCU pone de manifiesto que elegir el supermercado adecuado puede generar un ahorro significativo, destacando la importancia de la comparación de precios. Con una diferencia que puede llegar a ser tan amplia como 4.100 euros en Madrid, los consumidores están más incentivados que nunca a informarse sobre dónde realizar sus compras.

La OCU se subraya la necesidad de implementar más medidas para controlar la inflación y minimizar su impacto en los consumidores. Entre las propuestas, se destaca la importancia de mantener la reducción del IVA en los alimentos, extendiéndola a productos como la carne y el pescado, además de aumentar la cuantía y el número de beneficiarios del cheque de alimentos existente. Estas acciones ayudarían a aliviar la carga económica sobre los hogares más afectados por el incremento de los precios.

Finalmente, la organización destaca que la digitalización ha facilitado que los distribuidores ajusten sus precios de manera rápida, basándose en la oferta de sus competidores. Es más sencillo para ellos modificar los precios de sus propios productos que reducir márgenes en artículos de otros fabricantes. Sin embargo, surge el riesgo de que esta tecnología sea utilizada para coordinar precios en lugar de fomentar la competencia real. Así, los distribuidores podrían llegar a acuerdos tácitos que les permitan subir precios sin perder clientes, afectando la competencia y perjudicando al consumidor, ya que se reduciría la presión competitiva en el mercado.