Economía
Desde el 2% previo

Nuevo palo a Sánchez: el FMI recorta la previsión de crecimiento al 1,2% en 2023

El Fondo Monetario Internacional (FMI) estima que la economía española crecerá el 1,2% en 2023. El organismo realiza un duro recorte en su previsión para la evolución del crecimiento de España desde su anterior cálculo del 2% comunicado en julio. El Gobierno espera que el PIB español llegue al 2,1% el mismo año.

Del ritmo de crecimiento depende la evolución de los ingresos fiscales que deben financiar los programas de gasto diseñados por el Ejecutivo. Si la economía crece finalmente en 2023 el 1,2%, «todos los cálculos pasan a estar en entredicho, el déficit acabará siendo mayor y la deuda pública también estará por encima de lo establecido en las cuentas del Estado», afirman las fuentes de la institución de Washington consultadas por OKDIARIO.

La nueva previsión del FMI es peor que la del propio Banco de España, que es del 1,4%. El organismo cuestionó abiertamente al Gobierno con su nueva previsión.

Respecto a la inflación, el FMI prevé que cierre este año en el 8,8%, para moderarse al 4,9% el año que viene, en tanto que la tasa de paro se reducirá al 12,7% en 2022 y al 12,3% en 2023.

El FMI también calcula que, tras nueve años consecutivos con superávit por cuenta corriente, España cerrará este año con un déficit del 0,2%, tasa en la que se mantendrá en 2023.

En su revisión de las previsiones económicas globales publicada este martes, el FMI aumenta tres décimas, hasta el 4,3%, su proyección sobre el crecimiento de la economía española con respecto a su cálculo de julio, gracias a la recuperación de los servicios relacionados con el turismo y la producción industrial en la primera mitad de 2022.

Italia y Alemania, en recesión

El conjunto de las economías del euro crecerá el 3,1% este año (cinco décimas más de lo previsto anteriormente), pero se resentirá más de lo esperado en 2023, y sólo avanzará el 0,5% (siete décimas menos de lo estimado en julio).

El débil crecimiento de 2023 en toda Europa, señala el FMI en su informe, «refleja los efectos secundarios de la guerra en Ucrania, con revisiones a la baja especialmente pronunciadas para las economías más expuestas a los cortes del suministro de gas ruso y condiciones financieras más estrictas», recoge la agencia Efe.

Italia también se lleva la peor parte a futuro ya que, aunque este año crecerá el 3,2% gracias a la recuperación del sector turístico, el año que viene se frenará hasta acabar cayendo el 0,2%, según el FMI. Alemania, la primera economía del euro, sufre una de las peores estimaciones de crecimiento este año, el 1,5%, y el FMI incluso la coloca en recesión en 2023, con una caída del 0,3%.