Economía
NOMBRA NUEVO CONSEJERO DELEGADO

El negocio de Banco Popular no tira: su resultado se hunde un 50% hasta junio

Banco Popular ha registrado un beneficio neto atribuido de 93,9 millones de euros en la primera mitad de este año, lo que supone un descenso del 50% respecto al mismo periodo del año anterior. Incluso excluyendo los provisiones extraordinarias que ha realizado la entidad, el resultado cae un 10,6%, según la información remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

El banco que preside Ángel Ron justifica este desplome por el escenario adverso de tipos de interés en mínimos históricos, la supresión de las cláusulas suelo de los préstamos hipotecarios y la dotación realizada al nuevo Fondo Único de Resolución del Banco Central Europeo (BCE). A todo ello hay que sumar los 106 millones de euros que ha provisionado la entidad con carácter extraordinario y que ha provocado que el beneficio logrado en el segundo trimestre sea nulo.

Todos los márgenes se redujeron respecto a la primera mitad del pasado año, destacando el comportamiento del margen de intereses un 4,1%, hasta los 1.080 millones de euros; y la evolución del margen bruto un 12,1%, con 1.590 millones de euros. En cuanto a la solvencia, el ratio de capital CET1 fully loaded se sitúa en el 13,5%, mientras que la tasa de morosidad es una de las más altas del sistema financiero español: del 12,3%.

El banco asegura en la documentación enviada a la CNMV, que va a realizar un «firme plan» de reducción de costes para optimizar y adecuar la capacidad productiva al nivel de ingresos actual, que se encuentra «fuertemente presionado» por el entorno de tipos. «El modelo operativo resultantes estará focalizado en la eficiencia y la rentabilidad», señala la entidad.

Popular ha nombrado a Pedro Larena consejero delegado de la entidad en sustitución de Francisco Gómez, que ha llegado a un acuerdo de prejubilación con el banco. La entidad «agradece a Francisco Gómez su dedicación durante los treinta años que ha permanecido en el Grupo y reconoce su capacidad de gestión: durante su periodo como consejero delegado ha impulsado de manera notable la actividad comercial».

Pedro Larena, cuya función principal será la gestión ordinaria del negocio y tendrá la responsabilidad de ejecutar el plan estratégico presentado en la ampliación de capital, acumula una amplia experiencia en banca minorista, tanto en entidades financieras nacionales, como internacionales.

Popular inicia una nueva etapa de renovación y reestructuración de su negocio, para lo que ha separado la gestión de la actividad principal de la gestión del negocio inmobiliario y asociado. En este sentido, la actividad principal registró un beneficio de 577 millones en el primer semestre; mientras que el negocio inmobiliario y asociado generó unas pérdidas acumuladas de 483 millones de euros. El objetivo de esta división es que «una parte de la organización esté centrada en la generación del negocio rentable y recurrente; y la otra, en la reducción de activos no productivos y en la rentabilización del negocio inmobiliario corriente», apunta el banco.