Economía
mediapro

Moody’s rebaja el rating de Mediapro a «calidad pobre» y complica el futuro financiero de Roures

La agencia de calificación de riesgos norteamericana Moody´s ha degradado un escalón más el rating de la deuda de Mediapro, lo que complica aún más el futuro de la productora dirigida por Jaume Roures y Tatxo Benet y controlada por el fondo chino Orient Hontai.

La nueva calificación crediticia de Mediapro es Caa1 -antes B3, ya dentro de la categoría de ‘bono basura’-, lo que se traduce en inversiones «especulativas de pobre calidad sujetas a un riesgo de incumplimiento muy alto, y algunas pero no todas sus obligaciones de deuda a largo plazo pueden estar en incumplimiento», según la agencia. Además, según un informe de este jueves, Moody´s pone a Mediapro en perspectiva negativa.

La decisión de la agencia norteamericana se produce después de que el 20 de julio anunciara que ponía en revisión el rating de Joye Media, matriz del grupo, al observar un comportamiento del negocio en 2019 más débil de lo esperado y la expectativa de una contracción en los ingresos y beneficios de la compañía en 2020 a raíz de la crisis del coronavirus.

Moody´s alertaba ya en julio de las dificultades que iba a tener Mediapro para rentabilizar la inversión realizada para comprar los derechos de televisión de la liga francesa, más de 800 millones de euros por temporada durante tres años. De hecho, ya sembraba dudas sobre la posibilidad de que la productora pagara el primer plazo a la Liga, 150 millones en agosto. «Hay riesgos a la baja relacionados con la estrategia de la compañía para rentabilizar sus derechos de transmisión de la Liga1», decía la agencia.

Ahora, las dudas se han confirmado y Moody´s rebaja aún más la calificación financiera de Mediapro. La productora no ha pagado el segundo plazo -el 5 de octubre octubre, 172 millones de euros- y ha pedido a la Liga francesa renegociar el contrato debido a los efectos de la crisis provocada por el coronavirus. Esto ha obligado a la LFP francesa a pedir un crédito a un banco para poder pagar a los clubes y que éstos no entren en bancarrota.

Además, Roures señaló este miércoles en una rueda de prensa en París que probablemente tampoco pague el tercer plazo del contrato, en diciembre, que asciende a otros 150 millones de euros. Mediapro ha presentado un contencioso ante un tribunal de arbitraje francés para obligar a la Liga a renegociar el contrato, lo que jurídicamente le da aire y le permite no abonar ese tercer plazo de momento. «Nadie podía prever los efectos económicos y sociales del covid. Esto nos lleva a ver con la LFP cómo adaptarnos a esta situación, sin cuestionar el compromiso que asumimos en abril de 2018», dijo Roures.

Consecuencias para la productora

Es la segunda vez que la agencia Moody´s rebaja la calificación financiera de Mediapro este año. En enero anunció que iba a revisar el rating de la productora y el 27 de abril decidió rebajar de B1 a B3 la calidad crediticia de la compañía de Roures. B1 ya es una calificación considerada ‘bono basura’, al igual que B3, dos escalones menos.

Ahora la rebaja es un escalón más. La diferencia en esta graduación de la agencia es que Mediapro pasa de considerarse «inversión especulativa sujeta a un riesgo de incumplimiento alto» a «inversión especulativa de calidad pobre sujeta a un riesgo de incumplimiento muy alto».

La consecuencia para la productora de una rebaja de la deuda es que a la hora de pedir nueva financiación tendrá que pagar más intereses y será más difícil que le concedan créditos.

Y precisamente en estos momentos Mediapro se encuentra «buscando financiación», según admitió el propio Roures en la rueda de prensa de este miércoles en París. «Estamos buscando financiación. Nuestros accionistas, chinos, británicos, catalanes están ahí para apoyar. Mediapro no son cuatro tipos en una habitación. Tenemos una facturación de casi dos mil millones», señaló el empresario catalán.