Economía
Sector inmobiliario

La inflación y la subida de tipos desinflarán la burbuja inmobiliaria en la segunda mitad del año

  • Nayara Mateo
  • Redactora de economía, especializada en el sector inmobiliario, turismo, consumo y distribución. Antes en Expansión, Efe y Brainsre.news.

La inflación y la subida de tipos de interés ralentizarán la compra de viviendas y la firma de hipotecas en la segunda mitad del año, dejando atrás la posibilidad de una nueva burbuja inmobiliaria. “Veremos una reducción en el número de operaciones en la segunda mitad de 2022 y probablemente durante el próximo año 2023”, asegura Iñaki Unsain, presidente de la Asociación Española de Personal Shopper Inmobiliario (AEPSI).

Anna Puigdevall, directora general de la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (ANAI), explica que «es normal que se produzca cierta ralentización, porque estábamos en unos niveles de crecimiento que no eran sostenibles». Asimismo, vaticina que esta parálisis «será mayor hacia final de año debido a que los tipos de interés ya están subiendo y a que la inflación va a afectar al poder adquisitivo de los españoles y, por lo tanto, a su capacidad para poder acceder a una vivienda».

Desde Tinsa explican que, aunque hasta ahora se ha observado «una demanda activa», las cifras acumuladas de compra de viviendas «muestran una ligera desaceleración respecto al mismo período de 2021”. La directora del Servicio de Estudios de la tasadora, Cristina Arias, apunta que la política de incremento de tipos de interés del BCE para contener la elevada inflación provocará “un encarecimiento del nuevo crédito hipotecario, que, dada la sensibilidad de la demanda de vivienda a variaciones en los tipos de interés, puede modificar las intenciones de compra de los hogares”.

De hecho, ya en abril, el Colegio de Registradores alertó de que tanto la compraventa de viviendas como la firma de hipotecas habían sufrido una ralentización y, a pesar de que ambas anotaron crecimientos, éstos fueron «más moderados».

Precio de la vivienda

A esta situación se suma que el precio de la vivienda no para de aumentar: en el segundo trimestre del año subió un 2,4% en comparación con el trimestre anterior. En el último año, el precio de la vivienda nueva y usada se incrementó un 8,2%, hasta los 1.685 euros/m2, según datos de Tinsa.

Sin embargo, el mercado cree que esta tendencia alcista también se va a frenar en los próximos meses. «Se espera una desaceleración en el incremento de precios para la segunda mitad del año fruto de la subida del euríbor, que en junio ha cerrado en +0,852%», explica Montse Moreno, vicepresidenta de la AEPSI.

Por ello, Moreno afirma que ahora es «un buen momento para vender y no tanto para comprar, pues sólo es una opción aconsejable para aquellas personas con salarios más elevados que puedan adquirir un inmueble sin necesidad de hipoteca».

Mercado hipotecario

Debido al alza de los tipos de interés, las hipotecas se están encareciendo notablemente. El euríbor a 12 meses ha cerrado junio con una media del 0,852%, su nivel más alto desde agosto de 2012, lo que va a hacer que las hipotecas a tipo variable, cuya revisión sea en julio, se encarezcan unos 1.100 euros más al año.

Si un hipotecado tiene un préstamo de 150.000 euros a 25 años con un interés de euríbor más 1% y revisión anual, hasta ahora, el tipo que se le aplicaba era del 0,516% (-0,484% + 1%). Pero cuando se le actualice el interés con el valor de junio, pasará a tener un tipo del 1,85% (0,85% + 1%). Así, su cuota mensual subirá 91 euros y el hipotecado pagará 1.102 euros más que el año anterior.