Economía

Guindos: «No hay atajos, un Gobierno populista en España nos devolvería al inicio de la crisis»

«Desconfíen de los cantos de sirena y de los atajos», advertía Luis de Guindos en el curso organizado por APIE en la Universidad Menéndez Pelayo de Santander. «Si tras el 26 J sale en España un Gobierno populista volveremos a la casilla de arranque en la crisis y yo sé, porque estaba allí, lo que esto supone».

Así se ha manifestado el ministro en funciones en un debate que le ha enfrentado a sus homólogos en Podemos, Nacho Álvarez, Ciudadanos, Luis Garicano y PSOE, Pedro Saura. Muy centrados en destacar lo que todavía queda pendiente por hacer en España pero obviando los aciertos que este Ejecutivo ha tenido a la hora de salir de la crisis tras encontrarse nuestra economía a un paso del rescate.

Garicano echó en cara a Guindos que se tardaron 4 meses en tomar medidas duras pues se iban a celebrar las elecciones andaluzas y las asturianas. También alertó sobre los programas de gasto de Podemos metidos como estamos en un proceso de déficit excesivo.

Nacho Álvarez recordó que parte de los excesos que nos llevaron a la crisis se debieron a la laxa regulación que propugnan los liberales y que el auge de los populismos se debe a la senda de austeridad impuesta por Bruselas que ha empobrecido a todos sus ciudadanos en general. 

Saura por su lado, pidió que se articulen fórmulas para no perder el Estado del Bienestar propio de los europeos y para ello cree que es fundamental la mejora en la gobernanza europea.

En la anterior ponencia, José Luis Escrivá, presidente de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) alertaba de que España necesita un plan presupuestario a medio plazo realista y creíble para afianzar la sostenibilidad de las cuentas públicas. Este organismo, ajeno al Gobierno, certifica que nuestro país persiste en un déficit estructural de un 2% del PIB que hay que afrontar y que procede de la Seguridad Social y de las Comunidades Autónomas.

Por tanto, es necesaria una reforma normativa que mejore la disciplina presupuestaria en España así como las reglas fiscales. Para ello, es clave desarrollar una corresponsabilidad fiscal de los distintos niveles de la Administración que incluya una mejora en el Consejo de Política Fiscal y Financiera pues la UEM seguirá siendo imperfecta. Mejorar la credibilidad española es la forma ideal de atraer a los inversores, concluyó.

El presidente de la patronal, Joan Rosell, demanda que se aborde seriamente la negociación colectiva. En ella hay que hablar más de gestión y menos de ideología. Las eficiencias aplicadas a la Administración pueden liberar un montón de recursos que se destinen a otras cosas, dijo el presidente de la CEOE, que se pregunta por qué hay que bajar el IVA cultural y no el de los juguetes o el de los pañales.

Rosell pide a los políticos que todo aquello que prometan que vaya acompañado de una memoria económica y no le asusta abordar asuntos como Cataluña, el SMI, la mochila austriaca, o el incremento de los sueldos pues la mejor forma de obtener consensos es saber exactamente qué es lo que pide cada uno. A Rosell no le preocupa la inestabilidad política, de hecho, nunca le ha preocupado escuchando sus declaraciones.

El presidente de la Sareb, Jaime Echegoyen, calificó su compañía como una start up que nació con 51.000 millones de euros y que vende 25 activos inmobiliarios de media al mes. Gracias al llamado banco malo nuestras entidades financieras tienen más credibilidad, no le pasa lo mismo ahora a las italianas, y confía para el año 2017, 10 años antes de que la entidad se liquide, dejar de perder dinero. 

Sareb está facilitando activos inmobiliarios a los Ayuntamientos y Comunidades Autónomas para desarrollar planes que evitan que se queden en la calle aquellos que pierden su vivienda. Además y hasta que no concluya su encargo, siguen representando un 4% adicional de déficit público si el Estado tuviera que asumir su misión.

Concluyó la jornada, con la participación del presidente de SEOPAN, Julián Núñez, que dijo que llevamos 9 años de recesión en el sector de la construcción en España. El gasto público en este apartado se ha reducido a la mitad desde 2010 para conseguir la consolidación presupuestaria lo que nos ha llevado a ser el país europeo que menos dinero destina a esta partida.

Al mismo tiempo de las 10 grandes constructoras del mundo, 5 son españolas y somos tras China, el segundo país del mundo con mayor volumen de construcción internacional. El 73% de lo que hacen nuestras empresas lo hacen fuera.

Para reactivar el mercado en España pide un ambicioso plan de obras públicas en sectores como infraestructuras relacionadas con el Agua, con la Sanidad, con el transporte ferroviario y de mercancías y la cobertura digital. Cada euro que se invierte en este sector se duplica, recordó Núñez que apuesta por el modelo de colaboración público-privada que dista mucho de ser una privatización de las infraestructuras públicas.