Economía
JUNTA GENERAL

Goirigolzarri alerta de la deuda pública con la subida de tipos y asegura que CaixaBank no corre peligro

El presidente de la entidad apela a un plan de reconducción de nuestras cuentas públicas"

Gonzalo Gortázar subraya que el Grupo está “en posición de máximos y con capacidad para afrontar los retos futuros"

La Junta de Accionistas aprueba el pago de 0,2306 euros por acción como dividendo de 2022

CaixaBank sube más de un 2% en Bolsa tras ganar 3.145 millones en 2022

El presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, ha alertado del volumen alcanzado por la deuda pública española en un momento de subida de tipos de interés como medida del Banco Central Europeo (BCE) para luchar contra la inflación. Goirigolzarri ha asegurado, en la junta general de la entidad celebrada en Valencia, que: «Después del esfuerzo realizado por la pandemia, España sigue manteniendo ratios de deuda sobre PIB muy elevadas, y un déficit estructural cercano al 4% que, por otra parte, no se ha conseguido corregir en ningún momento en la última década».

Para el presidente de la entidad con la mayor red en España, esta situación debe ser tenida en cuenta por los responsables políticos «en un entorno en el que estamos asistiendo a una normalización de los niveles de tipos de interés, frente a las condiciones excepcionales que tuvimos en los últimos años». Y anticipó que «se volverá a la disciplina fiscal dentro de un plan de estabilización a nivel europeo».

Con esa convicción, Goirigolzarri mostró su coincidencia con el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, al apelar por la necesidad de lo que definició como «un plan de reconducción de nuestras cuentas públicas».

Tras señalar la «enorme volatilidad en los mercados que se ha visto reforzada por los últimos acontecimientos en Estados Unidos y Suiza», el presidente de CaixaBank hizo referencia a las últimas crisis bancarias en Estados Unidos y Suiza, de las que dijo: «Estos acontecimientos se producen en unos bancos con una situación y modelos de negocio muy distintos a los de la banca de nuestro país, y, desde luego, muy diferentes de CaixaBank».

Uno de los aspectos más destacados por Goirigolzarri ha sido la fortaleza del banco que, dijo, cuenta «con importantes fortalezas, una estrategia bien definida y un modelo diferencial único de hacer banca».

En ese sentido destacó que «el modelo típico de los bancos españoles es de una fuerte dispersión de depósitos». Además, la banca española tiene «una enorme diversificación» en sus inversiones «porque atendemos a todos los segmentos, desde grandes empresas a familias y porque nuestras ratios son extremadamente robustas en términos de liquidez y solvencia».

Para el presidente de CaixaBank, 2022 ha sido un año en el que «la realidad del mundo occidental ha tenido una transformación muy profunda, tanto desde el punto de vista geoestratégico, como desde el punto de vista económico». En ese sentido, destacó el entorno de bajo crecimiento -pese a la mejora de las expectativas- con una inflación en niveles nunca vistos desde hace cuatro décadas y un endeudamiento público acelerado en los últimos años como consecuencia de la pandemia del Covid19 y la invasión de Ucrania.

Eso ha llevado, tal como recordó ante los accionistas de CaixaBank, a que los bancos centrales se hayan visto obligados a «realizar subidas muy abruptas de los tipos de interés».

Goirigolzarri subrayó que, si bien es cierto que, en términos absolutos, los tipos no están en niveles históricamente altos; no es menos cierto que, en términos relativos, no se habían visto subidas de tipos tan rápidas en Estados Unidos desde la época de Paul Volcker en la década de los 80 del siglo pasado. Eso, para el presidente de CaixaBank: “Se ha transmitido a los mercados, obligando a los inversores a realizar un realineamiento de sus posiciones”.

Si a ello se le unen las incertidumbres derivadas de la invasión de Ucrania, explica la volatilidad actual de los los mercados, que se ha visto agudizada  por los últimos acontecimientos en Estados Unidos y Suiza.

Fortaleza de la entidad

Para Goirigolzarri: «Aunque los episodios de volatilidad pueden continuar, y siempre debemos ser prudentes creo, honestamente, que la banca española, por contraposición a lo que vivimos en la anterior crisis, está muy bien preparada y tiene una enorme fortaleza para enfrentarse a este tipo de situaciones».

Dentro de la estrategia que CaixaBank seguirá en los próximos años, su presidente destacó que la prioridad es: «Dar un decidido impulso a nuestro negocio, continuar adaptando nuestro modelo de atención a las nuevas necesidades de nuestros clientes, y todo ello con el objetivo de ser una referencia de sostenibilidad».

Por su parte, el consejero delegado de la entidad, Gonzalo Gortázar, subrayó en la junta «la fortaleza financiera» del Grupo CaixaBank que, aseguró: «Se encuentra en posición de máximos y con capacidad para afrontar los retos futuros y seguir apoyando a familias y empresas. Tanto por modelo de negocio como por principios de gestión, CaixaBank ha construido una posición muy sólida».

Gortázar confirmó su objetivo de «mantener a CaixaBank como la entidad de referencia para sus clientes y empleados, rentable y sostenible para sus accionistas y comprometida con la sociedad».

La junta general del banco ha aprobado el abono de un dividendo de 0,2306 euros por acción con cargo a los resultados de 2022, además del nombramiento de Peter Löscher como consejero independiente y la reelección como consejeros de Gonzalo Gortázar, Cristina Garmendia y Amparo Moraleda.