¿Qué son y cómo funcionan las ‘flagship stores’?
Una cadena, en un principio, cuando decide abrir un establecimiento, lo hace con la voluntad de que aquella apertura añada un beneficio a su grupo. Por lo tanto, antes de llevar a cabo la inversión, analiza con detalle todos los aspectos relacionados con el mercado y, finalmente, toma una decisión sobre la conveniencia o no de establecer aquella ubicación. Ahora bien, existe una excepción a esta norma, las llamadas flagship stores.
¿Qué es una flagship store?
La traducción de este término vendría a ser “tienda insignia” o “tienda emblemática”. Son establecimientos que se ubican en las principales vías de las ciudades más importantes y que, más que generar un beneficio, tienen como finalidad generar una imagen de marca. El simple hecho de ubicarse en un espacio que el público objetivo considera privilegiado ya le dota, a los ojos del consumidor, de una solvencia y fortaleza más importante que las otras. Los centros históricos de las grandes ciudades con más afluencia de turistas internacionales acostumbran a ser las localizaciones preferidas.
¿Cuáles son las diferencias entre una flagship store y otro establecimiento?
Algunos de los puntos que destacan de este tipo de establecimientos son los siguientes:
- Ubicación privilegiada: encontraremos estos establecimientos en las calles más exclusivas de las principales ciudades del mundo. Es donde hay una mayor acumulación de personas, especialmente turistas que, en muchos casos, disponen de un poder adquisitivo superior a la población del lugar.
- Oferta de servicios adicionales: además de vender el producto, pueden ofrecer otro tipo de servicios que en otros establecimientos no. Es una forma, pues, de atraer a más clientes hacia allí para que queden maravillados del lugar.
- Modernidad en la fachada e interior: dado que la finalidad es crear una imagen de marca, la empresa quiere transmitir lo mejor de ella. Por ese motivo, tanto el exterior como el interior serán especialmente impactantes y se dispondrá de todos aquellos productos y servicios que el cliente precise.
- No busca una rentabilidad en sí misma: el alquiler de un local en estas calles tan emblemáticas implica un coste muy elevado para la compañía. Por lo tanto, puede ser que no se llegue ni tan siquiera a cubrir costes y que, desde un punto de vista estrictamente económico acarree pérdidas.
- Buscan crear sensación de recuerdo: en los últimos años, ha habido una cierta homogeneización de los espacios. Pasear por el centro de cualquier ciudad europea implica, a nivel de comercios, encontrar prácticamente siempre las mismas marcas. Por lo tanto, esta repetición crea un recuerdo y transmite la imagen de internacionalización y modernidad buscada.
Temas:
- Manual del Emprendedor