Economía
EL ADMINISTRADOR CONCURSAL VE MÁS COMPLEJO EL CONCURSO DE ISOLUX QUE EL DE BANCO MADRID

Francisco Vera (Isolux): “Estudiaremos las ofertas que hay por la compañía”

El juez Carlos Nieto, del juzgado mercantil número uno de Madrid, designó recientemente como administradores concursales de Isolux CorsánFrancisco Vera, de Data Concursal, y a Santiago Hurtado, de Deloitte. De este modo, la administración concursal única la liderará Vera y auxiliará Hurtado junto al equipo de Deloitte.

Francisco Vera no es un novato en el asunto, más bien todo lo contrario. Ha sido administrador concursal de importantes compañías como Banco Madrid, Fiesta o el Grupo Arturo. Vera, abogado licenciado en la Universidad de Barcelona y formado en ESADE, IESE (Universidad de Navarra) y London Business School, es especialista en Business Law en el Muskegon Community College (Estados Unidos), y lidera Data Capital, despacho especializado en procesos concursales.

Pese al arduo trabajo que está conllevando la administración concursal de Isolux, Francisco Vera ha tenido unos minutos para OKDIARIO:

Pregunta: ¿Qué podemos esperar ahora con Isolux?

Respuesta: Una vez nombrado un Administrador Concursal y una vez nombrados los administradores sociales de la compañía, lo que tenemos que hacer es ver qué posición es la que tiene la compañía, entender cómo es el funcionamiento, y a partir de ahí, cuando ya tengamos la información suficiente, pues empezaremos a tomar decisiones conjuntas con la administración social en función de lo que se nos vaya planteando.

Dependemos mucho de la situación del negocio y de la situación de tesorería. Pero, por ahora, estamos analizando la situación y buscamos tener un buen entendimiento de cómo funciona toda la operativa de la compañía.

P: El agujero es de unos 800 millones de euros, la plantilla de casi 4.000 personas… ¿Podemos hablar de uno de los mayores concursos de acreedores de la historia de España?

R: Yo creo que sí. En cuanto a cifras de pasivo, de empresa industrial en funcionamiento, yo creo que sí que es una de las más grandes. Descontadas las empresas promotoras inmobiliarias.

P: Tú has sido Administrador Concursal en Banco de Madrid, ¿qué diferencias existen entre aquella y la de Isolux?

R: Banco Madrid era un banco pequeño, fundamentalmente dedicado a clientes pequeños. No tenía banca retail, ni oficinas y operaciones fuera de España, con lo cual la complejidad realmente que tiene el concurso es mucho mayor en el caso de Isolux que el de Banco Madrid, sin perjuicio de que en el caso de Banco Madrid teníamos 17.000 clientes que se han visto afectados por ese concurso.

Pero técnicamente, al menos en mi opinión, tiene muchísima más complejidad este concurso que el de Banco Madrid.

P: ¿Por qué?

R: Porque tenemos proyectos repartidos tanto a nivel nacional como internacional, y hay muchísimos países que tienen distintas legislaciones y distintas maneras de encarar los negocios y, lógicamente, con situaciones problemáticas y de paralización de proyectos, lo que implica mucha gestión en el día a día.

P: Ahora mismo ¿cuánto empleados tiene Isolux?

R: Cuando hay una crisis empresarial, en cualquier compañía se van produciendo bajas diarias. En caso de Isolux, hoy por hoy, debemos estar en algo más de 3.600 trabajadores.

P: En la última reunión que tuvo el consejo, celebrado hace sólo unos días, se anunció que se habían recibido hasta seis ofertas de grupos inversores. ¿Vais a escucharles?

R: Nosotros todavía estamos aterrizando. Esas ofertas las ha canalizado la actual administración social de la compañía, y nosotros ahora, al haber pasado sólo unos días desde que hemos aceptado el cargo, estamos tomando situación y viendo un poco toda la información que estamos requiriendo a la compañía.

Entonces, a día de hoy, no podemos posicionarnos de ninguna manera con respecto a esas ofertas.

P: ¿Se puede ser optimista con Isolux?

R: No es una cuestión de optimismo o pesimismo, sino de que nosotros como administración concursal, venimos aquí a hacer el trabajo que es el que la Ley Concursal nos obliga. Tenemos que intervenir la compañía y ver, dentro de esas operaciones que la propia administración social de la compañía nos propone, si están o no bien amparadas por la Ley Concursal, en cuanto a intervenir sus cobros y pagos, la cifra de negocio, etc.

No es cuestión de optimismo, sino de intentar hacer el trabajo que nos corresponde e intentar hacerlo de una manera profesional y positiva.