Economía
Así lo aseguran fuentes cercanas al proyecto español

España parte como «favorita» en la carrera para acoger el acelerador de partículas IFMIF-Dones

El proyecto del acelerador de partículas IFMIF-Dones se encuentra en la última fase para la elección del emplazamiento. España sólo competirá contra Croacia a menos que Bruselas decida finalmente ampliar el plazo (ya cerrado) para que Polonia se sume a la carrera. De cualquier forma, los miembros de la candidatura española, aunque no dan nada por hecho, consideran que Granada parte como favorita.

«Somos favoritos. Se está trabajando mucho y muy duro», señalan fuentes cercanas al equipo que coordina la candidatura española. «Con España en juego los demás tienen poco que hacer. Nuestra candidatura es la mejor desde un punto de vista técnico y de seriedad», apuntan.

Si finalmente España se hiciese con el proyecto, el IFMIF-Dones se ubicaría en Granada, concretamente en Escúzar, y podría suponer un retorno próximo a los 1.000 millones de euros y una creación de empleo integral de más de 12.000 puestos de trabajo.

El físico Carlos Alejaldre, que se encuentra al frente de la dirección técnica, explica que «siempre hay que ser optimistas», pero al mismo tiempo rebaja la euforia y advierte de que será un proceso difícil: «Es una oportunidad única y España está bien posicionada, pero sin duda no va a ser fácil».

La organización del proyecto se muestra optimista ante el «constante apoyo» del Gobierno y de la Junta de Andalucía. Desde el pasado verano, tanto el Ejecutivo de Mariano Rajoy como el de Susana Díaz han aunado esfuerzos para traer el acelerador de partículas a España y eso se ha traducido en que Granada disponga de muchas más papeletas para acoger el IFMIF-Dones.

En un principio parecía que Granada tendría un competidor menos de lo esperado, pero ahora todo depende de si Bruselas concede un plazo extra a Polonia, que en la última reunión de Fusion for Energy en Barcelona había manteniendo su interés por hacerse con el proyecto.

A la espera de la decisión se mantienen España y Croacia. El país balcánico presentó la documentación en la recta final del plazo y se unió a España en la carrera por acoger uno de los proyectos científicos más importantes a nivel europeo en varias décadas.