Economía
Muface

El dineral que van a pagar los funcionarios de MUFACE por su seguro médico

El inicio de 2025 trae consigo incertidumbre para los funcionarios adscritos al modelo de MUFACE, quienes podrían enfrentarse a un significativo incremento en los costes de su seguro médico. Aunque aún no se ha cerrado el acuerdo entre el Gobierno y las aseguradoras privadas, el tiempo para llegar a una solución se agota. Este escenario también afecta al Instituto Social de las Fuerzas Armadas (ISFAS) y la Mutualidad General Judicial (MUGEJU), organismos que comparten un esquema similar de modo que la preocupación aumenta ya que muchos se preguntan qué cantidad podrían llegar a pagar a partir de ahora los funcionarios de Muface por su seguro privado.

El modelo actual de MUFACE permite a los funcionarios beneficiarse de seguros de salud a un coste considerablemente reducido, incluyendo en la póliza a sus familiares directos sin un aumento proporcional de la prima. Sin embargo, las tensiones en la mesa de negociación, especialmente tras el abandono de Adeslas, Asisa y DKV, han puesto en riesgo este beneficio. Si no se alcanza un acuerdo, muchos funcionarios podrían enfrentarse a aumentos significativos en las primas o verse obligados a optar por la sanidad pública, que tendría que absorber cerca de un millón de nuevos pacientes en un plazo muy corto. El impacto económico para los mutualistas, especialmente para aquellos con familias, sería profundo. De no resolverse la situación, la carga financiera adicional podría superar ampliamente los 1.000 euros al año por familia, lo que supone un desafío para muchas economías domésticas.

Cuánto pagan actualmente los funcionarios de Muface

Actualmente, los funcionarios que pertenecen a MUFACE pagan una media de 478,36 euros anuales por su seguro médico. Esta cantidad cubre tanto al titular como a los familiares directos, incluidos hijos y parejas, que se benefician de las mismas condiciones sin un coste adicional. Este modelo se ha mantenido como uno de los más atractivos en comparación con las pólizas privadas.

Sin embargo, en caso de que las negociaciones actuales no lleguen a buen puerto, las aseguradoras podrían incrementar las primas hasta un 40%. Esto elevaría los costes hasta los 977 euros anuales, o incluso más en función de las características de cada familia. Las pólizas familiares, que incluyen a varios miembros, serían las más afectadas, con incrementos que podrían superar los 1.300 euros al año, por lo que el incremento sería más que considerable y surge la duda de si es algo que se pudiera asumir.

El coste de optar por un seguro privado

Si los funcionarios deciden contratar seguros privados fuera del convenio de MUFACE, el gasto sería significativamente mayor. Según los cálculos de expertos, las primas anuales para una familia con un titular de 38 años, su pareja y un hijo adolescente podrían ascender a 1.455 euros, muy por encima de los 478 euros que pagan actualmente. En el caso de un titular de 54 años con las mismas condiciones familiares, los costes podrían llegar a 1.837 euros anuales.

Los funcionarios solteros y sin cargas familiares serían los menos afectados por este cambio. Una persona de 38 años, por ejemplo, tendría que desembolsar unos 574 euros al año para acceder a una póliza básica. Sin embargo, quienes busquen una cobertura completa sin copagos podrían ver cómo sus gastos anuales se disparan hasta superar los 2.000 euros.

Las opciones: pagar más o volver a la sanidad pública

Uno de los puntos clave de la negociación actual es el impacto que tendría en la sanidad pública si los asegurados deciden no asumir los nuevos costes y optan por el sistema público. La sanidad pública tendría que absorber cerca de un millón de nuevos pacientes, un reto logístico y presupuestario que requiere una planificación urgente teniendo en cuenta que ya de por sí la situación es la de una asistencia saturada que evidentemente quedaría mucho más afectada al tener que asumir la asistencia de más de un millón de mutualistas.

Mientras tanto, desde el Ministerio de Función Pública se han emitido mensajes de calma, asegurando que se trabaja para que el modelo de MUFACE se mantenga. Sin embargo, el incremento del 40% en las primas que reclaman las aseguradoras es el principal escollo en estas negociaciones que por el momento no parecen ir por el buen camino.

El futuro de MUFACE: incertidumbre para 2025

El futuro del modelo MUFACE se encuentra en un punto crítico. Mientras las aseguradoras buscan aumentar sus ingresos mediante primas más altas, el Gobierno intenta evitar que los funcionarios vean afectada su economía de forma significativa. Las próximas semanas serán decisivas para determinar si los mutualistas tendrán que asumir un «dineral» o si se logrará un acuerdo que permita mantener el modelo actual.

Lo cierto es que cualquier cambio tendrá un impacto directo en la vida de los funcionarios y sus familias. La posibilidad de que estos incrementos se concreten deja una única certeza: los próximos meses marcarán un antes y un después en el sistema de seguro médico para funcionarios.