Economía
Subida del IPC al 3,3%

Comienza la ‘cuesta de septiembre’ con el precio de la luz, la gasolina y los alimentos disparados

Las vacaciones terminan para los españoles en un momento en el que el precio de la luz, los carburantes y algunos alimentos están disparados. El incremento de los costes de muchos productos básicos no va acompañado de una subida de los ingresos de los hogares, por lo que las familias harán frente a los recibos y facturas del mes de septiembre con menos dinero en el bolsillo.

Los precios en España se han disparado. Así lo demuestra el Índice de Precios de Consumo (IPC) de agosto, mes en el que la inflación en España se incrementó un 3,3% respecto al mismo al mismo periodo del año anterior y que supone una aceleración de cuatro décimas respecto a julio. De esta forma, encadena su octava tasa positiva consecutiva y continúa en sus niveles más altos desde 2017. Detrás del repunte general de los precios se sitúa la subida de la luz, pero no sólo eso, ya que también es más caro llenar el carro de la compra. El coste de los alimentos y bebidas no alcohólicas han subido en el octavo mes del año un 1,9% en comparación interanual.

Un auge en los precios que no va acompasado con el incremento de ingresos de los hogares. Y es que teniendo en cuenta los datos de julio, los últimos disponibles, los salarios pactados en convenio crecieron de media un 1,56%. Aunque se sitúan por encima de lo registrado a principios de año (1,4%) el repunte es inferior a la subida de los precios que pagan los consumidores.

Subidas del precio de la luz

Desde que comenzó 2021 los precios de la electricidad han pulverizado todos los récords históricos. El precio de la luz se ha disparado un 188% en el último año ante la pasividad del Ejecutivo de Pedro Sánchez, según datos de OMIE. De este modo, el precio medio diario de la electricidad en el mercado mayorista ha pasado de valer 46,01 euros el megavatio hora (euros/MWh) el pasado 1 de septiembre de 2020 a los 132,47 euros/MWh que marcará la luz este miércoles. Una escalada que está teniendo lugar ante las ineficientes medidas adoptadas por el Gobierno para contener esta subida.

Y a un recibo de la luz desorbitado se suma la escalada del precio de los carburantes. Exactamente, el litro de gasolina se ha encarecido casi un 18%, mientras que el del gasóleo remonta más de un 16%. Es decir, llenar un depósito medio de gasolina de 55 litros cuesta ahora 77,82 euros, unos 13,7 euros más que hace un año, mientras que en el caso de repostar con gasóleo asciende a 69,3 euros, unos 11 euros más. El incremento de los últimos meses ha venido de la mano de la recuperación en los precios del petróleo. El crudo de calidad Brent, referencia para el Viejo Continente, cotiza por encima de los 72 dólares por barril, mientras que el West Texas estadounidense supera los 69 dólares.