Economía
EL 13% SON ESPAÑOLES

Casi 60.000 profesionales sanitarios tendrán que abandonar Reino Unido por el ‘Brexit’

Un informe del Instituto de Investigaciones de Políticas Públicas (IPPR por sus siglas en inglés) del Reino Unido pone negro sobre blanco sobre cual sería el destino de la sanidad pública en aquél país si se aplica el Brexit. Apunta que los 57.000 facultativos provenientes de países comunitarios deberían o hacer las maletas y regresar al país que les vio nacer o arrancar un complejo proceso burocrático para poder seguir trabajando en la Gran Bretaña.

«Esto llevaría al colapso de la sanidad pública del país», dice Chris Murray, responsable del mencionado documento que avanza esta fatal consecuencia.

Por este motivo, Murray considera que “es fundamental para la salud pública que estos trabajadores no busquen trabajo en otros lugares. Todos los ciudadanos de la Unión Europea que trabajan actualmente en el sistema público de salud deberían poder solicitar la ciudadanía británica. Las instituciones sanitarias correspondientes serían los responsables de tramitar la petición”.

Pero esto sólo sería lo que los anglosajones califican como una wishful thinking. Porque el Brexit no dice eso sino que recojan los bártulos y dejen hueco a trabajadores ingleses. De hecho, el Instituto de Investigación de Políticas Públicas sugiere que todas aquellas personas que lleven más de 6 años viviendo y cotizando en Reino Unido adquieran automáticamente la nacionalidad británica.

El responsable del informe, Chris Murray, asegura que es importante tener “un gesto de generosidad” con los miles de trabajadores comunitarios que sostienen la salud británica. “Uno de cada diez médicos registrados en Reino Unido es un ciudadano de la Unión Europea”, recuerda Murray.

Más que una generosidad sería una política interesada pues es imposible que en un momento concreto, y más en un medio plazo, un país pueda sustituir tamaña cantidad de profesionales cualificados de un sector por nacionales sin que ese sector se resienta.

Algo aplicable a cualquier actividad productiva en UK. El centro de estudios IPPR entiende que “el sistema actual británico no permite tantos cambios legales”, y precisamente ese es uno de los principales problemas del país, afirma el IPPR. “Reformar el sistema actual de la ciudadanía británica es tan excesivamente complicado y burocrático que está disuadiendo a las rentas más altas, y a su vez es tan caro que también disuade a los trabajadores menos cualificados de los sectores de la economía donde se depende de este tipo de mano de obra”, sentencia Chris Murray.

Por último, les contaré que según datos de la Organización Médica Colegial (OMC) y del Consejo General de Enfermería, más de 6.000 enfermeros y 2.400 médicos españoles prestan sus servicios en los hospitales públicos británicos. Lo que equivaldría aproximadamente al 13% de esta masa laboral sanitaria con dedicación en lo público que debería marcharse con la música a otra parte.