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Gran Premio de China de F1

Verstappen clava su bandera en China con Sainz quinto y Alonso séptimo

El holandés vence por primera vez en Shanghái en una carrera muy simple para él

Max Verstappen ganó su cuarta carrera, la más fácil para él en este inicio de Mundial de Fórmula 1 en el Gran Premio de China, territorio que todavía no había conquistado. En un día de dominio de Red Bull, Checo Pérez no pudo ser segundo porque Lando Norris se sirvió de una estrategia excelente para ocupar dicha posición. Fernando Alonso, que arrancaba tercero, tuvo que remover tierra, mar y aire para lograr ser séptimo con vuelta rápida y Carlos Sainz remontó hasta la quinta plaza.

Día fácil para Verstappen en Shanghái, haciendo de lo desconocido algo sencillo para él y el avión que tiene en sus manos. El mismo que el que maneja su compañero, al que se le coló por delante un gran Norris. Alonso sufrió durante las primeras vueltas y luego confió ciegamente en la estrategia de Aston Martin para acabar séptimo. La escudería británica repitió con la fórmula del coche rápido en clasificación y lento en carrera, algo que deben mejorar cuanto antes para ser competitivos en lo más alto. Sainz, sin un sólo fallo, consiguió auparse hasta el top 5 en un fin de semana decepcionante de Ferrari.

La magia de Alonso llegó al circuito en la salida con un adelantamiento espectacular al Red Bull de Pérez por el interior de la interminable curva 1 del circuito de Shanghái y se ponía segundo por detrás de Verstappen a la primera de cambio. El asturiano resistió hasta la vuelta 5, momento en el que dejó de ofrecer resistencia y se centró en su defensa ante Norris y el resto de perseguidores. Uno de ellos es Sainz, que perdió posición con Russell en los compases iniciales de la carrera.

El panorama pintaba feo para Ferrari, a la vez que en Aston Martin se abría otra grieta con el adelantamiento de Norris a Alonso, cuya batalla pasaba a ser contra el otro McLaren, el de Oscar Piastri. Trenecillo de cinco pilotos encabezado por el asturiano que, indirectamente, mantenía muy cerca a Sainz de las posiciones de arriba. Este se la intentó devolver a George Russell durante varias vueltas, pero el británico se metió en boxes.

Dos banderas amarillas

Al mismo tiempo lo hizo Alonso para experimentar con un juego de duros y parar de degradar con el medio. Y las gomas blancas funcionaron, pero no lo vio McLaren, que aguantó a Norris incluso durante el coche de seguridad virtual que se desplegó tras una salida de pista de Valtteri Bottas por un fallo en su motor. El británico seguía segundo y hasta la vuelta 23 fue el único piloto que no había pisado el pit lane.

La lentitud de los comisarios llevó a dirección de carrera a sacar la bandera amarilla y muchos aprovecharon para renovar los neumáticos duros. Alonso también entró, pero en su caso le colocaron un juego de blandos. La carrera se relanzó en la vuelta 26, cuando por fin consiguieron retirar el Kick Sauber de Bottas. Al siguiente giro llegó el siguiente abandono tras un efecto dominó.

Ni una vuelta duró la prueba sin otro coche de seguridad, pues Lance Stroll se llevó puesto la parte trasera del monoplaza de Daniel Ricciardo en la resalida. Quien abandonó en primer lugar fue su compañero, Yuki Tsunoda, que vio como Kevin Magnussen le reventaba su rueda trasera derecha, obligándole a echarse a un lado y dejar una carrera que se ralentizaba. Y al poco tiempo lo haría también el australiano por esa incomprensible maniobra del de Aston Martin.

Y llegó el momento para Alonso y su última parada. Salía duodécimo y con su último juego de medios después de malgastar los blandos durante las dos banderas amarillas. Tenía 12 vueltas para remontar de forma épica y primero tenía que despojarse de los Alex Albon, Esteban Ocon y Nico Hulkenberg. Lo hizo en un visto y no visto, marcando la vuelta rápida, y la siguiente piedra en su camino era Lewis Hamilton. Antes de adelantarlo tuvo un bloqueo en la recta principal que bien le pudo costar la carrera, pero lo salvó de forma milagrosa.

Alonso se remanga y Verstappen gana

Todo el protagonismo era para él y en lo que la televisión decidió repetir su adelantamiento a Hamilton llegó el siguiente a Piastri para colocarse séptimo. Ahí parecía que acababa su recital cuando quedaban cinco vueltas y Russell estaba a 10 segundos. Finalmente, Verstappen venció como no podía ser de otra forma, Norris cruzó segundo y Pérez tercero. Alonso se tuvo que conformar con ser séptimo y Sainz firmó un buen quinto puesto.