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Paradas Romero retrata a los capos del arbitraje: «Me recriminaron no haber expulsado a Mourinho»

Nadie mejor que alguien que ha estado dentro para saber lo que pasa en una «organización» como la arbitral. Así definió José Luis Paradas Romero al sector al que perteneció en Primera División de 2007 a 2013 en una entrevista en Radio MARCA en la que además confirmó las artes que tienen sus capos.

Victoriano Sánchez Arminio (presidente), Díaz Vega (director técnico) y Raúl Massó (secretario) son estas personas. El ex colegiado malagueño destapó una de las tantas broncas que tuvo con el segundo de los mismos: «Me recriminó no haber expulsado a Mourinho, me dijo que había sido poco valiente». «Le dije que tenían fijación, que querían gente que fueran dominados y yo no era así», añadió Paradas Romero.

Precisamente el Victorianato que se vive quiso demostrarlo después de que Sánchez Arminio atacara a su persona en su última intervención en los medios: «El 27 de febrero de 2013 me negué a hacer las pruebas físicas porque Díaz Vega me había faltado el respeto y no toleraba sus malas formas». «En mayo me presenté y si bien es verdad que no las superé, ya me habían dicho antes que no iba a pitar más en la élite porque ya había tenido trascendencia», añadió.

Sin presiones… pero con oscurantismo

Paradas Romero siguió su intervención dando a diestro y siniestro al estamento arbitral: «Nunca he recibido presiones cuando he pitado al Madrid o al Barça pero sí que es cierto que cuando hay un error…». «Cuando expulsé a tres jugadores del Madrid, a Mourinho y a Rui Faría me dijeron que el informe era bueno pero que no les iba a pitar durante un tiempo», agregó el excolegiado después de la que lió en El Madrigal en 2012.

Por último, el ex colegiado reveló más detalles de la «organización» como la volvió a determinar: «Desde dentro no quieren problemas, presiones y hace falta cambiar. Existe mucho oscurantismo, los informes arbitrales no valen de nada, es el dedo de Sánchez Arminio». «Villar me dio la razón, él también pero luego entre todos se tienen que tapar. No quería árbitros pequeños y no se habla con los medios», finalizó.