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JUEGOS OLÍMPICOS DE RÍO 2016

Neymar quiere venganza tras el Maracanazo de las chicas y Brasil se planta en la final

Tras el Maracanazo 2.0 que vivió la selección de Marta y compañía en el mítico estadio ante Suecia al perder  en los penaltis y dejar pasar la opción histórica de llegar a una final olímpica como anfitrionas, la selección masculina buscará venganza y conseguir el oro en los Juegos Olímpicos que se les escapó a sus homólogas femeninas.

El fútbol pocas veces es justo, pero lo bonito es que siempre brinda segundas oportunidades. Eso le ha pasado a la selección olímpica de Brasil. El desolador final para los brasileños que llenaron Maracaná para ver como su selección femenina buscaba la final, se truncó y los espectadores se fueron con lágrimas en los ojos.

Hasta que apareció Neymar. El jugador culé, tan criticado en estos Juegos por no ejercer debidamente como capitán y por no destacar ni en juego ni con goles, ha borrazo de un plumazo la tristeza carioca, más concretamente a la velocidad de 15 segundos, el gol más rápido en la historia de unos Juegos Olímpicos. No hubo que esperar mucho más para la goleada, Gabriel Jesús con dos goles en treinta minutos hizo el resto. Después se unieron a la fiesta Marquinhos y Luan Vieira y, como no Neymar tuvo que clausurarla. Con un dominio de juego arrollador ante Honduras, los de Micale se han plantado en la final de Maracaná.

A pesar de no llegar a la final, la selección femenina de Brasil ha dado una lección al planeta. Un Maracaná lleno para verlas, niños sabiéndose de carrerilla la alineación y queriendo ser como Marta Viera da Silva, que no es ni la nueva Messi, ni la nueva Cristiano, es Marta. Una selección femenina que hace honor al famoso ‘jogo bonito’ brasileiro, no han llegado a la final, pero son olímpicas. Todos queremos ser Marta.

En Brasil, decir fútbol y final es decir demasiado. Y, hoy por hoy, en Río de Janeiro sólo se habla de la venganza de Neymar y compañía este próximo sábado en Maracaná.