Deportes

Mono Burgos: «Mi papel es decirle la verdad a Simeone»

El segundo entrenador y ex portero del Atlético de Madrid Germán ‘Mono’ Burgos charló largo y tendido con la revista Papel donde hizo un repaso a su carrera. De ella ha sido y sigue siendo una parte importante el Cholo Simeone, al que conoce de hace mucho tiempo. «Yo creo que desde toda la vida le conozco. Estuvimos ocho años comiendo así como estoy comiendo con vos, juntos. En el Atlético de Madrid. Y de entrenador. Yo levanto la vista y ya sé lo que va a decir, por qué está preocupado. Y él conmigo igual. Es una simbiosis importante».

Ambos forman la pareja ideal en los banquillos, se complementan a la perfección: «Mirá, los dos somos de carácter fuerte. Pero mi función es equilibrarlo a él. Liberarlo de dudas, de ansiedades. Yo no dudo. Nunca. Cuando vas con la verdad por delante no dudás. Mi papel es decirle la verdad: están para jugar éste, éste y éste. El papel de primer y segundo entrenador es como esos dúos de las películas de éxito. Como Robert De Niro y Joe Pesci».

«Yo entendí lo que era el Atleti cuando estaba en Mallorca. Veo un partido Leganés-Atlético de Madrid. Primer año en Segunda. Y veo cómo la gente iba por Butarque como una riada increíble. Y se me puso la piel de gallina. Y yo mirando el televisor me decía que quiero jugar ahí. Nuestra afición alienta al equipo aunque pierda. Veo campos en los que empiezan: «Hola, fondo norte, hola fondo sur». Y me digo, si van perdiendo qué cantarán entonces…», reconoció.

También explicó el por qué de su apodo y quién se lo puso: «Mis amigos me llaman Cabezón. En la cabeza que tengo me cabe un ordenador entero de la NASA. Gorila me lo puso Griguol. Y de ahí pasamos ya a Mono». Además confesó que tras el gol de Ramos en Lisboa en el minuto 93 le comentó algo a Simeone pero no quiso desvelar el mensaje.

«¿Si me dolió más Lisboa o Milán? Las dos, las dos. Pero es el mismo efecto que cuando sales campeón, sólo que al revés: en mí no dura nada. En Lisboa tras el gol en el minuto 93 le dije algo importante al Cholo. Algo que fue importante de ahí en adelante, pero no lo voy a decir. Yo no hablo mucho después de los partidos. Trato de callar, de no alterar, me voy. Pero ese día dije algo importante. El partido continuaba. Iba 1-1. No había terminado. Yo necesito de un pesimista a mi lado para vivir, soy un optimista nato. No puedo llevarme por emociones de jugadas. Yo estoy pensando, anotando, no me puedo llevar por la emoción. El Cholo tiene una manera de vivirlo en la que salta, patea, hace así con la gente. Yo tengo que complementar eso, el arquero tiene que ser frío, ¿entendés lo que te digo?», reveló.