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Tras la tercera jornada de test en Sepang

Marc Márquez explota por el rendimiento de su nueva Honda

Márquez siembra el pánico en MotoGP

Los retos del deporte español para 2023

Se acerca el inicio de la temporada de MotoGP y los motores se van calentando. Marc Márquez vuelve al ruedo tras un curso en el que las lesiones le lastraron durante todo su periplo en 2022. Sin embargo, aunque sus sensaciones físicas sean positivas, no está muy satisfecho con el funcionamiento de su moto durante las primeras tomas de contacto antes de que la temporada arranque el próximo 26 de marzo en Algarve (Portugal). El de Cervera afirma que «esta no es la moto» que necesita.

Márquez, que venía de realizar un tercer test en el Circuito de Sepang, cree que todavía tiene que «dar un paso adelante» en cuanto a ritmo y prestaciones del vehículo. El ocho veces campeón del mundo dio 55 vueltas al circuito malayo registrando una mejor marca de 1:58.666, a siete décimas de Luca Marini (Ducati), el piloto más rápido. El de Honda, finalmente, quedó décimo en esa tercera ronda de pruebas.

El valenciano afirmó que la jornada del domingo ha sido «más positiva» que las de viernes y sábado. «Ha sido el primer día en el que he podido empezar a trabajar en las áreas más pequeñas. Es cuando he podido empezar a ir más rápido, paso a paso. Pero aún tenemos que seguir con el programa, probando nuevos elementos. Quiero dar las gracias al equipo por organizarlo todo perfectamente y por trabajar tan bien durante todo el fin de semana», señaló.

«Tenemos los mismos problemas del año pasado. La velocidad punta no es mala, pero tardamos demasiado en llegar a esa punta, y eso es cosa de la tracción. En Europa, con rectas cortas, nos será difícil. Y en frenadas de gran velocidad también necesitamos parar mejor la moto para ser más constantes. En la frenada de la primera curva perdemos una décima y media o dos respecto de las Ducati», añadió el piloto.

Se quedó sin vuelta rápida

«Si tú eres realista es mucho más fácil controlar la ansiedad. Por la tarde todo el mundo puso la goma blanda, parecía una cronometrada, y los míos se quedaron en la caja. Tenemos que mejorar, porque estamos para entrar entre los cinco primeros pero muy justo», sentenció el de Cervera.