Locura en Múnich para ver al Real Madrid: 200.000 peticiones de entradas

El Bayern-Real Madrid ha desatado la locura entre los aficionados. En Múnich están como locos por ver a los de Zidane en el Allianz Arena. Tanto es así que, a día de hoy, el conjunto bávaro podría llenar tres estadios con la cantidad de seguidores que han solicitado una entrada para el Clásico europeo. Hasta 200.000 peticiones ha recibido la entidad muniquesa, a través de internet, de aficionados con ganas de acudir al encuentro entre estos dos colosos.

Seguramente muchos de sus aficionados desearían que no hubiese salido la bola del Real Madrid. No guardan muy buenos recuerdos de su última visita. Fue hace tres temporadas, con Guardiola en el banquillo local y Ancelotti en el visitante. Aquel día los blancos se impusieron por un contundente 4-0 que les metía en la final de la Champions, donde posteriormente ganaron la Décima.

Al igual que en aquella ocasión se espera un Allianz Arena lleno hasta la bandera para recibir al Real Madrid. El coliseo bávaro tiene capacidad para albergar hasta 70.000 espectadores en encuentros internacionales. Lo malo es que de las 200.000 solicitudes sólo podrán atender 30.000, debido a que cuentan con un gran número de abonados con derecho a asistir a los duelos de Liga de Campeones (35.000). Además hay que restarle las 3.779 entradas –un poco más del cinco por ciento impuesto por la UEFA– destinadas al combinado visitante más las que se queda el propio organismo.

Los precios de esas 30.000 entradas que sortearán entre los aficionados oscilan entre 35 y 150 euros. Sin embargo los aficionados del Bayern están dispuestos a desembolsar tal cantidad de dinero para convertir el estadio en una olla a presión, como ya hicieran en 2014, aunque aquella vez fue en la vuelta de las semifinales. No importa la ronda ni el precio de la entrada, el Bayern siempre acaba colgando el cartel de no hay billetes, especialmente cuando les visita el actual campeón de Europa.

El 30 de enero de 2007 fue la última vez que el templo bávaro no se llenó. Sucedió en un partido ante el Bochum. Desde ese instante siempre se ha puesto el cartel de no quedan entradas en las taquillas del Allianz Arena. Ni su dominio absoluto en la Bundesliga les impide dejar asientos vacíos. Ahora, tras eliminar al Arsenal en octavos (otro año más) se ven fuertes y motivados para afrontar la eliminatoria ante uno de los grandes favoritos a levantar el título.