Deportes
Liga EA Sports: Barcelona-Mallorca

Lamine Yamal salva a un Barcelona sin ideas

El Barcelona venció por la mínima al Mallorca gracias a un golazo de Lamine Yamal en el minuto 72

El Barcelona tiene un diamante y se llama Lamine Yamal Nasraoui. El joven extremo español, a sus 16 años, volvió a tirar del carro de su equipo con un auténtico golazo. Un gol que permitió a los de Xavi Hernández vencer por la mínima ante un Mallorca que acusó el cansancio acumulado en las últimas semanas.  Ahora toca centrarse en el trascendental choque de Champions League ante el Nápoles, pero podría hacerlo también sin Raphinha, que se retiró lesionado en la primera mitad.

Aunque Xavi no quisiera reconocerlo en rueda de prensa, la realidad es que estaba pensando más en el Nápoles que en la Liga. Prueba de ello fue que dejó en el banquillo a Lewandowski para dar entrada al joven Marc Guiu. El técnico español sabía que si no se clasifica para los cuartos de la Champions estará fuera. Por ello, el máximo goleador del equipo se quedaba en el banquillo.

Ya lo había avisado Javier Aguirre en la previa. El Mallorca iba a ir muy arriba y presionaría la salida de balón del Barça. Y eso hizo. Con Larin y Muriqi en punta, los bermellones (esta noche celestes) complicaban, y mucho, en los primeros minutos a Cubarsí e Iñigo Martinez en esta salida de balón. Podría escribir líneas de lo que ocurrió en los primeros 20 minutos, pero la realidad es que pasó absolutamente nada. Ni ocasiones, ni peligro, ni nada de nada por parte de ninguno de los dos equipos.

Y la primera ocasión llegó para dejar claro un nuevo escándalo en la Liga. Pizarro Gómez, desde el VAR, avisó a Iglesias Villanueva de un posible penalti que él mismo no lo había considerado estando a escasos metros de la jugada. Y era eso, un posible penalti porque de penalti no había nada. Raphinha corrió a la contra y al entrar al área Copete le rozó la bota y el brasileño se tiró al suelo como si le hubiera disparado desde la grada. Finalmente, Iglesias Villanueva, uno de los peores árbitros de la categoría pitó un inexistente penalti para que Gündogan lo fallara. O mejor dicho, para que Rajkovic lo parara.

A partir de ahí el partido volvió a lo que había sido antes, un auténtico sopor. Y en el 33 de partido el Mallorca salió a la contra con Muriqi y Larin. Tampoco necesitaban más para hacer daño a la defensa culé. El canadiense recibió un gran pase al espacio de Darder, que vio a Muriqi solo para empujarla, pero ahí estuvo el hombre del momento, Pau Cubarsí, para llevar a cabo una acción providencial y enviar el balón a córner.

Raphinha vuelve a caer

‘Montas un circo y te crecen los enanos’, eso dice el refranero español. Y eso es lo que le siguió ocurriendo al Barcelona, que vio como Raphinha se retiró lesionado en el 37′. El brasileño se une a la larga lista formada por Pedri, Gavi, Marcos Alonso, De Jong, Balde, Ferran Torres…

Ni la entrada de Fermín López, ni el fallo del penalti, ni el paso de los minutos hizo cambiar la dinámica. El ritmo lento, mejor dicho, lentísimo, desesperó a los aficionados que asistieron a Montjuic, que llevaron a cabo una sonora pitada a los jugadores culés. Merecidos los pitos, por cierto.

A la vuelta del descanso, el Mallorca se echó definitivamente atrás y esto implicó que el Barcelona apretara mucho más. Pero a balón parado iba a llegar el peligro de los bermellones. Y Muriqi, en un balón parado, remató de cabeza al larguero metiendo el miedo a los culés. No obstante, estaba en fuera de juego, pero el escalofrío había entrado en el cuerpo de los futbolistas azulgranas.

Lamine al larguero

De larguero a larguero y tiro porque me toca. Lamine Yamal recibió el balón en el borde del área y golpeó con potencia para enviar el balón al larguero, haciendo que los jugadores del Barcelona se echasen las manos a la cabeza. Rajkovic rozó el balón convirtiéndose en el héroe de su equipo, de momento. Y a falta de media hora para el final, Xavi Hernández no aguantó más y movió el avispero dando entrada a Vitor Roque y Lewandowski. Se retiraban, Marc Guiu y Joao Félix. El Barcelona tenía poco menos de media hora para meter un gol y salvar los muebles.

El brasileño quería reivindicarse ante la falta de minutos y entró con muchas ganas, pero era sólo eso, ganas. Lo que viene siendo mucho ruido y pocas nueces. Tuvo una ocasión de cabeza a pase de Lewandowski, pero envió el balón a las nubes.

Pero llegó el minuto 72 y Lamine Yamal se vistió de Leo Messi para salvar a al Barcelona. Recordando a muchos de los goles que hizo el argentino con la misma camiseta y con 16 años, el bueno de Lamine disparó desde el borde del área perfectamente colocado para que Rajkovic sólo pudiera hacer la estatua. Menuda perla tiene el Barça con este chaval. A partir de ahí, los locales se conformaron con el resultado y prácticamente dejaron pasar los minutos. El Mallorca desapareció del encuentro por el gran cansancio que acumulaban sus hombres en las piernas.