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Klopp pide perdón tras la debacle del Liverpool

El Liverpool vivió una noche negra en su estreno en Champions. La dura derrota ante el Nápoles en el Diego Armando Maradona ha dejado muy tocado al equipo de Jürgen Klopp, que cayeron por 4-1 en un partido donde el resultado pudo ser más abultado. El técnico red ha tenido que salir al paso para pedir disculpas a la afición tras la derrota.

«Fue una noche muy decepcionante, así que tengo que pedirles perdón», comenzó diciendo un Klopp cabizbajo. «Los problemas que tuvimos fueron obvios. El primero de todos es que el Nápoles jugó un partido realmente bueno y nosotros jugamos uno realmente malo. Fue realmente difícil de aceptar, pero no tan difícil de explicar cuando viste el partido».

«¿Por qué jugamos tan mal? No podemos ignorar el mal comienzo y los dos penaltis, pero no jugamos lo suficientemente bien. La pregunta es por qué los chicos no jugaron un buen partido. Así que es mi trabajo resolverla. Es mi responsabilidad», explicó el preparador alemán que asume toda la responsabilidad de lo sucedido. «Con Alisson en la portería, hay que estar muy mal para que pase eso. Parece que tenemos que reinventarnos. Faltan muchas cosas», comentó.

La derrota ha dejado en el alambre a Klopp, que preguntado por si temía su despido el técnico se mostró claro: «En realidad, no, pero ¿quién sabe? Hay diferentes tipos de propietarios. Nuestros propietarios son bastante tranquilos y esperan a que yo resuelva la situación y no esperan que alguien más lo haga. Así es como siempre lo vieron y el día que cambien de opinión me lo dirán».

Soluciones

El Liverpool atraviesa una crisis de juego en los últimos partidos que le ha llevado a la derrota en Nápoles y séptimo en la Premier League. No obstante, Klopp ya trabaja en busca de las soluciones: «Es el trabajo que tenemos que hacer. No es que tengamos que inventar un nuevo tipo de fútbol, tenemos que mejorar. Necesito tiempo para decir las cosas correctas porque en este momento no está todo claro al 100%».

El técnico alemán asegura que no se olvida de la derrota en Champions pero en su mente ya está preparar el próximo encuentro de la Premier: «Jugamos contra el Wolverhampton el sábado y probablemente no pueden dejar de reírse. Dirían, y yo también, que es el momento perfecto para jugar contra nosotros».