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En la inauguración de la Cruyff Court

Jordi Cruyff saca pecho pese a la derrota: «Hemos enviado una señal al mundo”

El Barça no sale vivo de la casa del terror

Xavi: «Fuimos mejor que el Bayern pero no podemos perdonar»

El Barcelona vivió este martes su primera decepción de la temporada frente al Bayern de Munich, donde no logró salir victorioso del Allianz Arena. A pesar de la derrota por 2-0, los culés se mostraron más que satisfechos una vez finalizado el encuentro. Uno de los que ha sacado pecho tras ello ha sido Jordi Cruyff. El secretario técnico del Barcelona se mostró contento y optimista en la presentación de la Cruyff Court, iniciativa que pretende promover la práctica del deporte entre los más pequeños como forma de inclusión, cohesión y transformación social.

“Ayer dimos un paso adelante. No estamos contentos porque siempre queremos ganar, pero lo importante es que competimos bien. Hemos enviado una señal a todo el mundo. Somos optimistas”, declaró el directivo holandés. Y es que nadie duda del gran partido que cosechó el Barcelona en uno de los campos más complicados de Europa. El equipo dirigido por Xavi Hernández le plantó cara a los alemanes y le miró a los ojos al gigante bávaro, pero sin éxito al estar muy desacertado en la parcela ofensiva.

Cruyff, en la presentación de este nuevo proyecto, quiso llegar más al fondo de la cuestión sobre el estado actual del equipo, donde no dudó en transmitir optimismo a la afición azulgrana. El secretario técnico habló también sobre la posibilidad de que llegue un título esta misma temporada a las vitrinas del Camp Nou: “Es evidente que estamos por el buen camino. Hemos de seguir trabajando y seguir creciendo, siempre con los pies en el suelo. Tenemos un buen equipo”.

Por último, tampoco quiso evadir el tema que más está dando de qué hablar en las últimas semanas. Y ese fue el del ‘caso Griezmann’, donde dudó sobre la buena fe del Atlético de Madrid. “No deja de ser curioso que siempre entre en el minuto 63″. Cabe destacar que el Atlético de Madrid sigue enrocado en su posición de seguir dando entrada al francés a partir del minuto 60 de cada partido al no querer pagar al Barcelona los 40 millones de euros de la cláusula.