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¿Por qué es tan importante Ayón para el Real Madrid?

  • Nacho Atanes
  • Redactor de deportes y canterano de OKDIARIO. Desde 2016 cubriendo la información de tenis. También baloncesto, fútbol, ciclismo y otros contenidos.

El Real Madrid se encuentra en una situación crítica de cara a la planificación de la próxima temporada. Gustavo Ayón, su gran estrella interior y posiblemente el jugador de más difícil reemplazo en el mercado, está cerca de dejar el equipo, a pesar de los esfuerzos realizados desde el club por renovarle, de momento innecesarios.

El jugador mexicano tiene ya 31 años y su aportación no iba a ser eterna, pero su conservado físico y una inteligencia fuera de lo común en su posición le hacen una figura única en Europa. Una figura que el Real Madrid está cerca de perder.

El equipo blanco propone un estilo de baloncesto insólito en el continente, del cual en el pasado se dudaba que estuviera hecho para ganar, algo que Pablo Laso se ha encargado de desmentir con cinco años repletos de títulos. Sin embargo, hasta hace dos años, la figura del pívot no terminaba de cuajar. 

La llegada de Gustavo Ayón dejó algunas dudas por su inactividad en la NBA y su posible falta de compatibilidad con los otros interiores dominantes de la plantilla, Bourousis y Felipe Reyes. Sin embargo, con el paso de los meses, el Titán de Nayarit se hizo indiscutiblemente con el puesto de ‘5’ titular, dejando de lado las preguntas sobre su posición ideal y aportando al Real Madrid registros que no había podido obtener con anterioridad, algo que se ha acentuado esta temporada, en la que se ha convertido en el auténtico pilar ofensivo y defensivo – tras la salida de Slaughter – de la zona madridista.

Ayón, en un partido contra el Barcelona. (AFP)

El compañero perfecto

Su movilidad en pista es inigualable en Europa. No solo se trata de un jugador muy rápido y flexible para su tallaje – 2’07 y más de 110 kilos – sino que además sabe por dónde moverse y cuándo, sirviendo de gran ayuda para las anticipaciones y ayudas defensivas, así como para espaciar el ataque del Real, que necesita de una zona limpia para las penetraciones de sus estrellas exteriores. Su conexión con los bases y creadores de juego – aquí hay que sumar a Rudy – es letal. A través de los bloqueos se convierte en indetectable, logrando continuaciones hacia el aro o la libertad del base para una bandeja o tiro fácil, gracias a la amenaza que supone para los rivales en estas situaciones.

Hablábamos antes de las dudas de compatibilidad con Reyes a su llegada al Real Madrid, pero lo cierto es que han acabado formando una de las mejores parejas de Europa, y la que más se asocia directamente, con innumerables asistencias del uno al otro que dejan otra posible secuela de su marcha del Real Madrid. Hay pocos – o ninguno – pasadores como él. 

El gran pilar defensivo del Real Madrid

Con la marcha de Marcus Slaughter el Real Madrid se vio necesitado de un relevo que pudiera aportar en defensa gran parte de lo que hacía el antiguo ’44’ merengue. Ayón fue, una vez más la solución. De una manera diferente al americano – no se trata de un perfil tan extremadamente móvil – logró poner el cerrojo al aro madridista, llegar a todas las ayudas necesarias y lo que es más importante, contagiar a su equipo de que a través de la defensa se podían ganar los partidos importantes, donde siempre verás destacar a Gustavo Ayón. 

Gustavo Ayón pelea por un balón. (Getty)

Efectivo y muy fiable en ataque

Dejamos para el final la versión anotadora de Ayón, aparentemente la más fácil de suplir por el Real Madrid. Sin embargo, en esta faceta también tendría mucho que trabajar Laso, pues el mexicano es un jugador de enormes porcentajes y fiabilidad máxima. Sin ser un jugador de rachas ni de tiro destacable – su gran lunar son los tiros libres y de media distancia – se ha acostumbrado a superar por velocidad e inteligencia a sus pares, tanto con el balón como sin él, donde, como ya hemos comentado, es capaz de producir de forma sobresaliente desde los bloqueos y recepciones al espacio.

El resultado de este ‘simple’ método al que está sumando poco a poco registros – le hemos visto varios 1vs1 al poste en los playoff – es asegurar prácticamente un mínimo de 10 puntos cada noche, superando la veintena en numerosas ocasiones, que le permiten alcanzar valoraciones de escándalo.