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Se le sigue esperando en el Camp Nou

¿Dónde está Griezmann?

Griezmann está completando un inicio de temporada muy lejano al que se esperaba de él. Su fría relación con Messi y la falta de adaptación, determinantes. Sus números hablan por sí solos.

¿Qué le pasa a Antoine Griezmann en el Barcelona? Algo no va bien para el delantero francés durante estos primeros meses en el Camp Nou. La frescura, la chispa, el liderazgo que mostraba en el Atlético de Madrid están en hibernación con la elástica blaugrana. Su mejor nivel está aún lejos del que estilaba en el Wanda Metropolitano y parece que no encuentra la forma de sacarlo a relucir con el Barça.

La rueda de prensa previa al encuentro de Champions League ante el Inter de Milán fue sintomática. La apatía con la que compareció el francés y su rostro presagiaban lo peor. La pregunta clave llegó con Leo Messi. Desde la pretemporada, quedó patente la poca o nula conexión que existía entre el argentino y el nuevo fichaje culé. No había química pero tampoco parecía haber intención ni interés para que existiera. Ya desde aquel entonces trascendió que al 10 blaugrana no le cae muy bien el galo…

«Al final no es alguien que habla mucho, yo tampoco, difícil que nos hablemos. Le he llevado algún mate, estamos en la buena dirección y él ha estado lesionado y es complicado aprender esa conexión y mejorar, pero somos dos chicos buena gente y aquí estoy para ayudar a cualquier persona del equipo», decía sin tapujos, sin esconderse, Antoine Griezmann. Reconoce la falta de relación entre el argentino y él, quizá por la forma de ser de ambos, aunque el capitán intentó despejar polémicas…

Griezmann no está cómodo en estos primeros meses en el Barça. Si en el Atlético de Madrid todo giraba en torno a él, ya que era la figura y jugador más determinante, en el Camp Nou la cosa cambia. Es uno más dentro de un vestuario de élite, en un entorno muy diferente a lo que estaba acostumbrado con el Cholo Simeone. Y esto está trascendiendo sobre el césped. El encuentro ante el Inter de Milán fue uno más para la colección en lo que va de temporada, otro partido más insípido para el francés.

De nuevo, Griezmann fue un carrusel de errores, malos controles y ocasiones desaprovechadas que pesan mucho no solo al equipo, sino también a una moral dañada como es la del francés. No está suelto, no está cómodo y no está acertado. Todo suma y en este caso para peor. Ante los italianos, con el 1-1 en el marcador, falló un mano a mano clarísimo ante Handanovic –tras asistencia de Leo Messi–, que se pensó tanto que mandó a la red lateral. Fue el segundo cambio de Valverde, salió por Dembélé.

Pero los números del galo no solo se limitan a la Champions League. Ya en Liga, ante la ausencia de Leo Messi, no ha llegado en ningún momento a echarse al equipo a su espalda, no ha sabido liderar ni marcar diferencias –sí lo han hecho Suárez e incluso el joven Ansu Fati–. A Griezmann se le espera mientras sus números dejan que desear.

Se marcó un doblete y asistencia ante el Betis en el partido inaugural… y poco más. Fue su mejor partido con los culés y esto fue a finales de agosto. Sumó otro gol ante el Villarreal y otra asistencia ante el Valencia. Y ya está, nada más. El francés es a día de hoy el cuarto jugador que más balones ha perdido en lo que va de temporada con los culés (70), solo superado por Sergi Roberto (72), Semedo (76) y Carlos Pérez (84). No está cómodo Griezmann…