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Lideró a los Warriors con una actuación de época

Curry explota con su mayor anotación histórica: ¡62 puntos! y victoria ante los Blazers

Stephen Curry se destapó con su mejor marca anotadora en la NBA. El base lideró la victoria de los Golden State Warriors sobre los Portland Trail Blazers de Damian Lillard y Carmelo Anthony (137-122) con 62 puntos

  • Nacho Atanes
  • Redactor de deportes y canterano de OKDIARIO. Desde 2016 cubriendo la información de tenis. También baloncesto, fútbol, ciclismo y otros contenidos.

Los mejores Golden State Warriors no se entienden sin la figura de Stephen Curry como piedra angular del proyecto y la actual versión de la franquicia, si bien en horas bajas, sigue teniendo al ’30’ como gran líder. Curry es un hombre en una misión y sabe que debe emplearse más que nunca, a la par de su talento, para devolver a los Warriors a lo más alto de la NBA. Su inicio individual de temporada fue esperanzador, tras un año de lesiones, pero ante los Portland Trail Blazers, el dos veces MVP de la liga alcanzó su zenit.

Director de orquesta pero, sobre todo, ejecutor, Don Stephen se fue hasta los 62 puntos en la victoria (137-122) del equipo de la Bahía sobre unos Blazers que cuentan con Damian Lillard, uno de los mejores bases de la NBA, pero eclipsado por una actuación excelsa de un Curry absolutamente en trance anotador.

En tan sólo 36 minutos –pudo descansar el equivalente a un cuarto entero– Curry anotó canastas de todos los colores, fino desde la larga distancia con ocho triples en un 50% de acierto, y prácticamente infalible en la línea de tiros libres –18/19 anotados–. Estas dos facetas, pilares en su juego, le dieron el grueso de los puntos de su tarjeta, aderezados con penetraciones marca de la casa, algunas de ellas tras un crossover que hizo retrotraerse a los tiempos del mejor Stephen, un Stephen que, pese al bajón de los Warriors, sigue ahí.

Una actuación para la historia

En total, 62 puntos acompañados de 5 rebotes y cuatro asistencias, en una carta de tiro de 18 de 31. No le importó no contar con acompañamiento en cuanto a puntos se refiere. No lo necesitaba. Los irregulares Wiggins y Oubre Jr intentaron colaborar, con mediocre éxito, al igual que Wiseman. La sensación es que Curry podría haber dado 25 asistencias si hubiera querido, pero optó por la vía rápida, la de los puntos en unas de las manos más fiables de la historia en este aspecto. Las suyas.

Uno de los puntos a tener en cuenta en la ecuación fue el regreso de Draymond Green, en su segundo partido de la temporada. No es un anotador y sólo pudo aportar un punto a la causa, pero sus 8 asistencias dejan pistas de que su combinación con Curry apunta a seguir siendo mortal un año más, esta vez sin Klay Thompson como tercer elemento y arma desequilibrante ante grandes defensas. Nadie entiende a Curry como Green, que también merece un hueco en la mayor gesta anotadora de Don Stephen en sus años de prolífica carrera en la NBA.