Cristiano amenaza a su víctima favorita

Cristiano Ronaldo tendrá ante el Sevilla la oportunidad de romper su sequía de cara al gol en Liga. El delantero madridista se enfrenta a su rival favorito. Un equipo al que le ha marcado más que a ningún otro, la friolera de 25 goles desde su desembarco en el Santiago Bernabéu en 2009. El portugués no atraviesa por su mejor momento goleador en lo que a la competición doméstica se refiere. Pero para ello, tendrá a su víctima preferida.

Al contrario que en Champions, donde Cristiano viene de batir un nuevo récord al marcar en todas y cada una de las jornadas de la primera fase, en Liga sólo ha hecho dos goles en lo que va de temporada. El conjunto madridista no anda fino en su faceta goleadora. Ni el luso ni Benzema están cumpliendo con las expectativas y los blancos están acusando su falta de puntería.

Después de encarrilar más de 70 encuentros consecutivos marcando, los madridistas han dejado imbatidas las metas rivales en tres ocasiones, en lo que va de curso. Ante el Athletic volvieron a pecar de una debilidad anotadora hasta el momento inédita. Por ello, ante el Sevilla no pueden perdonar.

El ariete llega al encuentro después de recibir el Balón de Oro, que le acredita como mejor jugador del mundo en el año que está a punto de terminar. Y quiere refrendarlo haciendo lo que mejor se le da, marcar. Frente a los hispalenses tendrá la oportunidad de volver a reencontrarse con su mejor versión. Esa en la que Cristiano se ha convertido en el dueño y señor de el continente, donde es capaz de someter a cualquier rival a base de goles.

Las sensaciones en casa están siendo totalmente contrarias a las que muestra en Liga de Campeones, pero deberá recuperarlas si quiere seguir logrando sumar títulos con el conjunto madridista. No hay mejor momento entonces que este sábado. Y es que, cuando los blancos se miden a los sevillanos, parece que la portería se agranda para Cristiano.

En los 15 partidos en los que se ha medido al conjunto andaluz, ha logrado perforarles en 25 ocasiones, una media goleadora superior a la que lleva de blanco. Y eso no es nada fácil. Del total de los tantos anotados ante los sevillistas, 11 de ellos han sido en el Bernabéu, el escenario idóneo para estrenar su nuevo trofeo que le acredita como mejor jugador del mundo.

Un delantero de su nivel, tiene que estar a la altura de las circunstancias y, ante las bajas defensivas que le harán a Zidane recomponer su zaga, el luso tiene que dar el do de pecho y llevar a los suyos hacia la victoria. Los tres puntos pasan de nuevo por sus botas. Así como en Champions, su carácter goleador ha sido esencial para sellar el pase de los madridistas a octavos, en Liga la faceta anotadora de la estrella del Real Madrid se hace indispensable para tratar de recortar los ocho puntos de ventaja del Barcelona y acercarse a la pelea por el título.