Deportes
Mundial 2018 de Rusia

La contundente carta de María Gómez tras las críticas recibidas

La periodista publicó un comunicado explicando su punto de vista y pidiendo reflexión

María Gómez, periodista de Mediaset enviada al Mundial 2018 de Rusia, saltó al foco mediático, concretamente al de las redes sociales, en la previa y tras la eliminación de España ante la anfitriona en la tanda de penaltis. El motivo no fue otro que el enésimo gesto machista que se visualiza por televisión.

Previo al encuentro decisivo para La Roja, durante un directo en calles rusas, la periodista fue asaltada por un hombre y le dio un beso en la mejilla. El susodicho, entre risas, huyó a la carrera tras aquello. La indignación de la periodista no pasó por alto y las redes la apoyaron.

Tras el varapalo español, Gómez volvió a ser protagonista por otro episodio innecesario. La periodista entrevistaba a un grupo de aficionados españoles cuando uno de ellos le espetó: “¿Cómo te llamas, guapa?”. Ante esto, la comunicadora de Mediaset respondió tajante: “María, pero lo de guapa no hace falta. María, periodista”. Fue este el corte que realmente incendió las redes y que la ha llevado a publicar un comunicado en sus redes.

“Hola, soy María Gómez, periodista. Mi trabajo consiste en contar historias, así que os contaré la mía para que nadie lo haga por mí”, iniciaba su comunicado en Twitter, que ya ha tenido más de 5.000 retweets y se aproxima a los 10.000 likes. Gómez proseguía contando su currículum y cómo había llegado a cubrir un Mundial de fútbol. Tras ello, justificó su respuesta al hincha español: “Decidí poner límite a un comentario sobre mi aspecto físico que, en mi opinión, estaba fuera de contexto. No lo consideré prudente, apropiado ni ejemplar durante una retransmisión ante millones de espectadores y en un momento tan sensible como el que vivimos en el que sí, los gestos cuentan. Por ello le hice saber a ese aficionado mi postura de un modo respetuoso pero firme”. 

La periodista aseguró también que nunca juzgó lo de éste último de “acoso” ni “la posibilidad de denunciarle”, y que tras la conexión en directo todo se solucionó “con unas simples disculpas”. Al hilo de esto, Gómez rompió una lanza a favor de las profesionales femeninas a las que se les cuestiona “el talento, la preparación o la valía en función de su físico. Una triste demostración de la longitud del camino que aún queda por recorrer”. 

También hace autocrítica

María Gómez reconoce en su comunicado que ella también comete errores. Ella misma lo explicaba: “Participé en tono distendido en una sección televisiva que, salvando las distancias, también contribuía a la cosificación de los futbolistas. Pido disculpas por ello. Bastaron un par de intervenciones para darme cuenta de mi error y tras comunicarlo a la dirección del programa, dejé de intervenir en esa sección”.

La periodista llegaba a dos conclusiones con esta polémica. “La primera verdad es que necesitamos un debate, una reflexión serena que nos permita escuchar las voces de todos sin estridencias. Debemos mirarnos al espejo como seguramente no lo hemos hecho hasta hoy y estar dispuestos a aceptar que es posible que no nos guste el reflejo que nos devuelva el cristal”. La segunda hacia referencia a la realidad: “A juzgar por el tono, la actitud o la precipitación de algunas reacciones, parece tristemente evidente que muchos aún no están preparados para hacerlo”.