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Champions League femenina: Barcelona-Wolfsburgo

El Barcelona golea al Wolfsburgo y el Chelsea será su rival en semifinales de la Champions

El Barcelona golea al Wolfsburgo (6-1) en cuartos de final de la Champions por un global de 10-2 y avanza a semifinales

Esperan al Chelsea, que remontó con un 3-0 al Manchester City, que ganó en la ida 2-0

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El Barcelona ha certificado su clasificación para las semifinales de la Champions League tras golear al Wofsburgo. Las de Pere Romeu se desquitaron de su derrota en el Clásico imponiéndose por 6-1 para completar un global de 10-2. Un triunfo con el que demuestran nuevamente su superioridad en Europa y que las permite seguir optando al que sería su tercer título continental consecutivo. Se enfrentarán en la siguiente fase al Chelsea.

Las blaugranas jugarán sus séptimas semifinales de Champions de forma consecutiva e intentarán pasar una ronda más para jugar la que sería la quinta final consecutiva. No hubo una 19ª victoria en el Clásico pero el Barça no falló este jueves y estará en su clásica cita con las ‘semis’ europeas. Y con un insultante 10-2 en el global de estos cuartos.

Una presión alta del Barça permitió a las blaugranas recuperar un balón, gracias a Ewa Pajor, que Aitana Bonmatí convirtió en un gran pase para Salma Paralluelo, que libre de marca pudo ir avanzando hacia Borbe y estudiar el escenario perfecto para marcar, de tiro raso cruzado imparable. A los 10 minutos de partido, 100 de la eliminatoria, el Barça sellaba el pase a semifinales.

Pero no había conformidad alguna. Brugts tiró de primeras pero la zaga alemana, de cabeza, logró que el balón se fuera al larguero y a córner. La misma Esmee Brugts tuvo otra ocasión poco después, de tiro lejano, pero fue Salma quien volvió a marcar diez minutos después a pase, gran pase atrás, de la lateral neerlandesa.

Y la española, confiada, tiró de primeras con la derecha para volver a batir a Borbe. El Barça no quería historias y salió a demostrarlo, como si la eliminatoria estuviera igualada, o hasta perdida, antes de empezar este partido.

Sin duda, el Barça tuvo esta tarde-noche en el Johan Cruyff –que se fue llenando– la actitud necesaria para dejar atrás el Clásico y para llegar de la mejor manera a ‘semis’ de esta Liga de Campeones Femenina, dispuestas a defender la doble corona que ostentan y que confían en volver a ponerse en Lisboa. Aunque para optar a ello todavía queda un duro cruce por delante.

Para que no se hiciera larga la espera, el equipo de Pere Romeu optó por dar una alegría más a su afición y, todavía antes del descanso, poner el 3-0 en el marcador. Como premio a su gran primera parte, fue Esmee Brugts quien hizo más daño a las alemanas, yendo con fe a por un rechace y con un gran disparo lejano pegado al palo derecho de la portería defendida por Borbe.

Tras el descanso el partido cambió por completo. Lo que en la primera parte era hambre de goles en el Barça, en la segunda parte mutó a tener el control absoluto de todo y sin riesgo alguno. Si el balón se acercaba sin cometer errores al área rival, bien. Si no, las blaugranas se dedicaron a ir dejando pasar el tiempo que las separaba del billete a semifinales.

Y como el Wolfsburgo tampoco quiso ir a apretar arriba ni arriesgar en busca, siquiera, de un intento de remontada, pues el partido tuvo en los primeros minutos de la reanudación momentos más lentos, rozando el aburrimiento. Hasta que entró una de las jugadoras que más salsa le ponen al asunto, una que siente los colores y no entiende de relajaciones.

Entró Claudia Pina y, en la primera ocasión que tuvo, volvió a activar la fiesta en el Johan Cruyff con un tiro colocado a pase de la capitana Alexia Putellas, que se desquitó así de un par de jugadas previas en las que perdió el balón. Un gol más para Pina, máxima goleadora blaugrana en la competición continental.

No fue más que en una jugada aislada, revisada por el VAR pero sin ver una posible falta previa sobre Aitana, que el Wolfsburgo pudo marcar el gol del honor. En una salida algo arriesgada de Cata Coll, el balón rebotó en Endemann y el rechace le cayó a Lineth Beerensteyn, que acababa de entrar, para que marcara a placer.

Pero no fue ni un aviso para un Barça que dominaba la eliminatoria a placer, por un global de 8-2 en ese momento, y que volvió a activar Claudia Pina. La atacante quiso seguir con su idilio con esta Champions y marcó un auténtico golazo de falta directa, dejando a Borbe sin saber siquiera qué había pasado; palo y golazo con manita incluida. Y se sumó a ese carro Mapi León, que subió la apuesta con otro golazo, quizá más bonito todavía, en otra falta directa; larguero y gol. Fiesta completa camino a unas ‘semis’ de récord.