Los de Xavi caen ante Boca en los penaltis

El Barça no gana ni la Maradona Cup

El Barça fue incapaz de llevarse la Maradona Cup tras empatar a uno con Boca Juniors y perder en la tanda de penaltis tras dos errores

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Riqui Puig (FC Barcelona) durante el partido ante Boca Juniors.
Riqui Puig, durante el partido ante Boca Juniors. (@FCBarcelona_es)

Hasta Riad, Arabia Saudí, se fue el Barça para celebrar el homenaje a Diego Armando Maradona. Los culés no fueron capaces ni de ganarle a Boca Juniors ni de llevarse esta Maradona Cup en la tanda de penaltis. Tras el gol de Ferrán Jutglà y el empate de Zeballos en la recta final del partido en un repleto King Saud University Stadium, todo se saldó de los 11 metros con felicidad para los xeneize. Se queda el equipo de Xavi Hernández con otro traspié en un partido lento, con muchas jóvenes en el once blaugrana donde la titularidad y minutos de Dani Alves fueron lo único positivo que le quedó a este Barcelona.

Salía Xavi con un popurrí de novedades pero con las ideas inamovibles. El 4-3-3 volvía a plasmarse ante Boca Juniors aunque lo que cambiaban eran los nombres. Se esperaba con muchas ganas el debut de Dani Alves y no defraudó con su titularidad en el lateral diestro, algo que deja entrever dónde le quiere ver el egarense a partir de enero. Eric García y Lenglet fueron los centrales titulares, con Baldé en el carril zurdo. Neto era el guardameta. En la medular era sorpresa Álvaro Sanz, que debutaba como pivote a lo Busquets. Demir y Riqui Puig actuaban de interiores, con Ferrán Jutglà como extremo diestro, Dest como izquierdo y Coutinho como falso 9 haciendo de referencia.

El once del Barça ante Boca Juniors. (@FCBarcelona_es)

El Barça fue dominador pese al extraño puzzle que montó Xavi para alinear a todas su piezas, demostró superioridad ante un conjunto xeneize que también sacó de inicio a parte de los menos habituales en este homenaje a la Pelusa en la Maradona Cup. Sin embargo, al igual que pasa con los titulares, el equipo mostró sensibles debilidades a la contra. Lenglet sufrió descaradamente en alguna carrera hacia atrás. Un par de acciones de Riqui Puig, con un disparo lejano que atrapó fácil el portero, y otro de Coutinho tras un caño en la frontal que se le fue fuera. El más activo durante el primer tiempo fue Dani Alves, tanto en la conducción, la asociación como el peligro en la frontal con un par de disparos, uno lejano y un libre directo que no causaron peligro.

Tras el descanso, Xavi metió en el campo a Mingueza e Ilias Akhomach por Lenglet y Demir. Parece que el austriaco no le convence al culé, que tiene otras preferencias en las posiciones tanto de interior como de extremo.  El segundo tiempo comenzó algo más animado, al menos con goles. Jutglà se encuentra una pelota en el área, se gira rápido y saca un potente disparo para hacer el 1-0 ante Boca. Los argentinos se quejaron tanto de una mano de Coutinho previa que habilita al canterano y de la posición de Riqui Puig, que molesta en la visión del portero. El colegiado no vio nada.

Boca tuvo alguna que otra ocasión para igualar el partido con algunos errores en la salida de balón de los culés. Neto tuvo que salvar un par de mano a mano con notable firmeza, demostrando que está preparado para dar el releve a Ter Stegen cuando sea necesario. Xavi siguió haciendo algunos cambios y dio entrada a otros canteranos como Comas, Matheus, Guillem y Mika Mármol, dando relevo a Dest, Álvaro Sánz, Eric García y Coutinho. Esto dejó pasa a un Dani Alves en la posición de interior.

No sentó nada bien los cambios al Barça, que vio como Boca se venía arriba y comenzaba a tentar el área de Neto cada vez más rápido. De un balón profundo al extremo izquierdo llegaría el gol de Zeballos, que marcó a placer con la zurda dentro del área. La recta final fue un monólogo de la escuadra xeneize, que buscó e intentó llevarse el partido pero no logró hacer el segundo antes del pitido final y la tanda de penaltis. Fue ahí donde se le fue la Maradona Cup a los culés tras los dos lanzamientos erráticos de Matheus y de Guillen Jaime, que dejaron con otro sabor amargo al Barça.

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