Es posible que lleves tiempo haciendo las cosas mal: estos son los errores que cometes cuando tienes perro

• Blanca Espada @blank7133
• Redactora de contenidos en OkDiario. Escribiendo para blogs y empresas de contenidos digitales desde 2007.
• • 26/09/2023 08:15
  • Actualizado: 26/09/2023 08:15

Los perros son los mejores amigos del hombre, pero a veces no les damos el trato que se merecen. Muchas veces, por desconocimiento o por falta de tiempo, cometemos errores que pueden afectar a la salud y al bienestar de nuestros peludos compañeros, así que es posible que lleves tiempo haciendo las cosas mal y deberías corregir lo que ahora te enumeramos, cuanto antes. Estos son los errores que cometes cuando tienes perro.

Los errores que cometes cuando tienes perro

Cada perro es un mundo y tiene su propia personalidad, de modo que debes conocerle bien e intentar educarlo de la mejor manera posible (a veces incluso con la ayuda de un instructor). Para ello, será bueno evitar los siguientes errores que cometes con tu perro y que suelen ser bastante comunes:

• No corregirle cuando hace algo mal al momento: Es importante corregir a tu perro de manera inmediata cuando hace algo mal. Los perros no entienden represalias mucho tiempo después de un comportamiento indeseado, por lo que debes ser coherente y oportuno en tu corrección.
• Meterle el hocico en el pipí o la caca cuando lo hace en casa: Esta acción no solo es ineficaz, sino que puede resultar en que el perro se sienta confundido y asustado. En lugar de esto, utiliza refuerzos positivos para enseñarle a tu perro dónde debe hacer sus necesidades.
• Darle demasiadas golosinas: El exceso de golosinas puede llevar a problemas de salud como la obesidad. Controla la cantidad de golosinas y elige opciones saludables.
• No saber qué recompensas son las que más le gustan: Cada perro tiene sus preferencias. Conoce qué recompensas son las más efectivas para tu mascota y úsalas como incentivo en el entrenamiento.
• No atarles con el cinturón de seguridad en el coche o no llevarlos de forma adecuada: La seguridad en el coche es esencial. Utiliza un cinturón de seguridad para perros o una jaula de transporte para proteger a tu mascota en viajes.
• Dejarlos encerrados en el coche: Nunca dejes a tu perro solo en un coche, especialmente en días calurosos. Las altas temperaturas pueden ser mortales.
• Limpiar la casa con productos químicos demasiado fuertes: Los productos químicos fuertes pueden ser perjudiciales para tu perro. Opta por limpiadores seguros y asegúrate de que tu mascota no tenga acceso a las áreas recién limpiadas.
• No ponerle chip o no registrarlo: El chip de identificación es crucial en caso de que tu perro se pierda. Regístralo adecuadamente para que puedas ser localizado si es necesario.
• Pensar que tu perro coge tu zapato o zapatilla para romperlo: A menudo, los perros no destrozan tus cosas por malicia, sino por aburrimiento o ansiedad. Proporciona juguetes adecuados y ejercicio para prevenir este comportamiento y si siempre coge tu zapatilla es simple: te echa de menos y con ella se siente mejor porque huele a ti.
• No hacerle socializar de cachorro: La socialización temprana es fundamental para que tu perro se convierta en un adulto bien adaptado. Expónlo a diferentes situaciones y personas desde una edad temprana.
• Soltarle para que juegue con perros que no conoce: No todos los perros se llevan bien entre sí. Controla las interacciones de tu perro con otros caninos y asegúrate de que sean seguras.
• Compartir comida del mismo plato con el perro: Alimentar a tu perro de tu plato puede llevar a problemas de comportamiento y salud. Establece horarios de alimentación regulares y evita compartir tu comida.
• Echarle la bronca al perro: El castigo excesivo puede dañar la relación con tu perro y aumentar la ansiedad. En su lugar, utiliza técnicas de entrenamiento basadas en refuerzos positivos.
• Darle demasiada comida: La sobrealimentación puede llevar a la obesidad y otros problemas de salud. Sigue las recomendaciones de tu veterinario para la cantidad adecuada de comida.
• Decirle que pare de ladrar: En lugar de simplemente decirle que pare de ladrar, identifica la causa de su ladrido y aborda el problema subyacente. Además, si ladra de repente o al escuchar un ruido o alguien que llama a nuestro timbre lo hace por simple protección. Debes fomentar que sea un perro más sociable y también, hacerle caso, no basta con darle un grito para que pare.
• No cepillarle los dientes y darle a cambio una golosina para ello: El cuidado dental es esencial para la salud de tu perro. Acostúmbralo al cepillado dental desde joven y utiliza productos diseñados para mascotas.