Ni bicarbonato ni limón: el truco más eficaz de los profesionales para quitar el mal olor de la lavadora en minutos

Una colada eficaz depende no solo de los productos empleados o del tipo de tejido, sino también de cómo está la lavadora. Aunque este electrodoméstico está diseñado para limpiar, su propio uso continuo acumula humedad, restos de detergente, pelusas y microorganismos que, con el tiempo, generan mal olor. Quitar el mal olor de la lavadora se convierte así en una tarea esencial.

Y atentos acá, porque no basta con lavar ropa con frecuencia: es fundamental prestar atención al estado interno de la lavadora, especialmente si se quiere evitar que los malos olores se transfieran a las prendas.

 ¿Cuál es el truco de los profesionales para quitar el mal olor de la lavadora?

Los técnicos en mantenimiento de electrodomésticos no suelen recomendar el uso de productos como bicarbonato o limón. El truco que utilizan muchos profesionales consiste en realizar una limpieza profunda mediante productos desinfectantes industriales o específicos para lavadoras, en combinación con agua caliente.

Estos son los pasos detallados para aplicar este método:

1. Vaciar la lavadora completamente.
2. Colocar un producto desinfectante específico (puede ser lejía apta para electrodomésticos o ácido cítrico técnico) en el tambor o cajón.
3. Iniciar un programa de lavado a 60º sin ropa.
4. Tras el ciclo, limpiar manualmente el tambor, la goma de la puerta y los dispensadores.
5. Dejar la puerta abierta para secar por completo.
6. Este proceso debe realizarse al menos una vez cada mes y garantiza la eliminación de bacterias, moho y residuos acumulados.

Y cabe remarcar que aunque el bicarbonato o limón sean económicos y fáciles de conseguir, no eliminan los microorganismos causantes del mal olor, y su efecto es sólo temporal.

Causas comunes del mal olor en la lavadora

Los malos olores en la lavadora tienen su origen, en la mayoría de los casos, en la acumulación de humedad y residuos en zonas clave como el tambor, la goma de la puerta, el filtro y el cajón del detergente.

Estas son algunas de las prácticas más frecuentes que podrían causar el mal olor en tu lavadora:

• Uso excesivo de detergente: provoca residuos que no siempre se eliminan en el enjuague.
• Lavados constantes con agua fría: no permiten eliminar bacterias o moho.
• Ropa olvidada dentro del tambor: genera ambientes húmedos donde proliferan hongos.
• Falta de ventilación tras los ciclos de lavado: mantiene el interior en condiciones propicias para malos olores. Por eso, lo mejor es no cerrar la lavadora inmediatamente después de usarla.
• Olvidar limpiar la goma, el filtro y el cajón del detergente.

Corregir estas rutinas es tan importante como aplicar el método de limpieza profundo. Además, utilizar detergentes adecuados y en la cantidad justa evita la formación de espuma excesiva y residuos.

Medidas básicas para evitar olores desagradables en la lavadora

Para quitar el mal olor de la lavadora de forma efectiva, conviene implementar una rutina de limpieza mensual. Estas son algunas prácticas preventivas que funcionan bien:

• Dejar la puerta y cajones abiertos tras cada uso para que el tambor se seque correctamente.
• Usar programas de agua caliente al menos una vez al mes para eliminar residuos orgánicos y bacterias.
• Limpiar el cajón del detergente y el filtro regularmente, ya que son zonas propensas a acumulaciones.
• Secar la goma de la puerta con un paño absorbente tras cada lavado.
• A pesar de todas estas medidas, si el mal olor persiste, se debe recurrir a un método más eficaz.