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Claves para llevar a cabo una operación bikini efectiva durante la desescalada

Si deseas llevar a cabo una operación bikini efectiva durante la desescalada, debes fijarte en la alimentación, hacer ejercicio e hidratar bien el cuerpo.

Haber pasado casi dos meses en confinamiento y sobre todo, haber reducido la ansiedad comiendo de todo, habrá pasado factura a más de una persona, de modo que tal vez sea bueno repasar algunas claves para poder llevar a cabo una operación bikini antes de que termine la desescalada.

Lo cierto es que todavía no sabemos exactamente si se nos va a permitir o no ir a la playa durante los próximos meses, pero en el caso de que así sea o de que tal vez, tengamos oportunidad de ir a la piscina, seguro que muchas personas piensan ahora en poder recuperar un poco el físico, o perder esos kilos de más que han cogido durante el confinamiento.

Claves para llevar a cabo una operación bikini efectiva durante la desescalada

Según los expertos, durante estas semanas de confinamiento, la media de aumento de peso puede estar entre los 3 y los 5 kilos debido a esas ganas de aliviar la ansiedad por el encierro a base de dulces y alimentos calóricos (recordemos que la cerveza y los «snacks» han sido de los alimentos que más se han comprado estas últimas semanas) y a ello se le ha sumado también el hecho de haber reducido bastante la actividad física.

Por ello, una «operación bikini» de emergencia, requiere soluciones efectivas. Y si deseas ponerte en forma antes de que acabe el periodo de desescalada o tal vez después, de cara al mes de agosto,  es importante no solo comer sano y eliminar cualquiera de los alimentos nada saludables que han llenado tu despensa estas semanas, sino que también deberemos tener en cuenta otros factores.

Ejercicio y alimentación

Una de las primeras claves que evidentemente se recomiendan, es el ejercicio, pero este debe ser algo que hagamos a diario. De modo, puedes salir a correr (o caminar) todos los días (dentro del horario establecido) o tal vez ejercitarte en casa haciendo alguna tabla de fitness, de yoga e incluso bailando o haciendo zumba.

En cuanto a la alimentación, es mejor desterrar todas las bolsas de snacks, dulces y alimentos que solo aportan calorías y apostar mejor por las frutas y verduras que pueden ser nuestras auténticas aliadas a la hora de perder peso, gracias a su cantidad de fibras que nos permiten eliminar las grasas del organismo y además nos llenan vitaminas. Además, muchas de ellas son saciantes de modo que si te comes un plátano o una manzana, notarás tu estómago lleno durante más tiempo.

Por otro lado, será bueno tomar también proteínas (aportadas por la carne y el pescado) que llenarán a nuestro organismo de la energía necesaria para poder ejercitarnos y además, ver resultado ya que tienen un papel clave en la construcción y desarrollo del músculo. Para cocinar estos alimentos, lo mejor es cocinarlos a la plancha (con un poco de aceite de oliva), acompañado de un poco de verdura cocinada al vapor.

La importancia de la hidratación

Otro de los factores clave para poder llevar a cabo una «operación bikini» de emergencia como esta es tener en cuenta la hidratación y más ahora que comienza a notarse el calor. Cuanto más sube la temperatura, más fácilmente se puede deshidratar nuestro cuerpo por lo que es aconsejable beber una media de litro y medio o dos litros al día.

Esa hidratación servirá también para que recuperemos algo de brillo y luminosidad en el rostro, que tal vez hemos perdido durante estas semanas debido a la falta de sol. Por otro lado, no nos olvidemos de la importancia de vitamina D aportada que por el sol, de modo que  sigamos saliendo al balcón o a la terraza aunque eso sí, no olvidemos proteger el rostro con una crema SPF.

Cuidado con las dietas extremas

Aunque hemos hablado de la alimentación para poder llevar a cabo una operación bikini en condiciones, no debemos caer en la tentación de ponernos ahora a dieta y en concreto, al hecho de hacer una de esas dietas extremas que suelen publicitarse tanto. No todas son efectivas y lo peor, es que si eliminamos radicalmente determinados alimentos, es posible que perdamos peso de forma rápida, pero lo más seguro es que lo recuperemos (e incluso más) en cuanto dejemos la dieta.