Las pruebas de ADN descubren la verdadera identidad del Yeti
Todos hemos oído hablar del Yeti. Ese famoso monstruo que supuestamente habita entre las montañas del Himalaya del que todo el mundo conoce su historia pero del que nadie puede aportar unas pruebas empíricas. Existen muchas leyendas en torno a un monstruo ancestral utilizado en muchas ocasiones para acentuar simples historias de terror con más de un final trágico. Por eso un equipo internacional de científicos y analistas han querido unir sus fuerzas conocer de una vez por todas la gran verdad sobre el monstruo de las nieves. Te lo contamos.
La realidad sobre el Yeti
Un grupo de científicos de distintos países del mundo han querido desmontar una de las leyendas más populares que existen. Hablamos del Yeti, un monstruo centenario que siempre ha sido más mito que realidad. Con la finalidad de imponer la verdad por delante, este comité internacional ha llevado a cabo un análisis de ADN a un total de 9 supuestos restos del Yeti que se conservan tanto en museos como en colecciones privadas. Dientes, pelo, piel, huesos o incluso heces han sido analizados con suma precisión para determinar el verdadero origen del monstruo. Unas muestras obtenidas gracias a la dedicación de la productora Icon Films, empresa muy interesada en resolver este misterio.
Los resultados fueron lo esperado, y es que el mito «El abominable Hombre de las Nieves» tiene más que ver con animales convencionales que con monstruos. En 8 de las muestras, el ADN pertenece a osos negros asiáticos y osos tibetanos. Mientras que la última de las evidencias no es más que un diente de un perro. Toda una decepción para aquellos que aseguraban haberlo visto en alguna ocasión y una victoria para las personas que creyeron el mito como algo imposible.
Una leyenda imparable
Las recientes pruebas de ADN determinan que al menos las muestras punibles de el Yeti son una auténtica invención. «Nuestros hallazgos sugieren claramente que los fundamentos biológicos de la leyenda Yeti se pueden encontrar en los osos locales, y nuestro estudio demuestra que la genética debería ser capaz de desentrañar otros misterios similares. De igual forma, nuevas muestras del Yeti podrían contribuir a refutar o contradecir este trabajo», afirma Charlotte Lindqvist, Profesor de la Universidad de Buffalo. Y es que no es la primera vez que se intenta tirar por tierra la historia del hombre de las nieves, ya en 2014, una investigación de la Universidad de Oxford intentó acabar con la leyenda. Sin éxito.
Está claro, por muchas pruebas que se muestren sobre la falsedad de este tipo de mitos, las leyendas y las historias seguirán permaneciendo en la memoria de la población. Las costumbres arraigadas son tan arraigadas en cuento a este monstruo que parece ser que ni todas las pruebas del mundo podrán tirar por tierra el mito del «Abominable Hombre de las Nieves».