Comunidad Valenciana
EMERGENCIAS SANITARIAS

El fallecimiento de un paciente desata un escándalo por el traslado a Valencia del CICU de Alicante

El CICU envió desde Valencia un recurso que distaba 29 mientras había un segundo recurso no movilizado a 7 kilómetros

El PP dice que "es de locos pensar que se puede gestionar una urgencia desde Valencia" cuando ocurre en Alicante

Mazón devolverá a Alicante y Castellón los CICU que Puig centralizará en Valencia en 48 horas

El fallecimiento de un paciente por cuya vida nada pudieron hacer los servicios de emergencia a su llegada, ha desatado un nuevo escándalo por la decisión del pasado enero del Gobierno valenciano que preside el socialista Ximo Puig de centralizar en Valencia los servicios del Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU) y el desmantelamiento de ese mismo CICU en Alicante.

Los hechos, según han relatado fuentes del Sindicato Médico de la Comunidad Valenciana (CESM-CV), se desencadenaron en la madrugada del sábado al domingo, cuando desde el CICU, que ahora está centralizado en Valencia, se movilizó un recurso SAMU desde Elche para atender en la pedanía ilicitana de La Marina a un paciente inconsciente y con problemas respiratorios. Con la particularidad de que, pese a pertenecer al término de Elche, La Marina se encuentra alejada del punto de partida desde esta ciudad.

Por ello, el citado vehículo, siempre según las mismas fuentes, tuvo que recorrer 29 kilómetros y atravesar poblaciones, lo que le llevó a alcanzar su destino en un tiempo en torno a los 29 minutos, cuando había otro SAMU operativo en Guardamar-Rojales, distante sólo 7 kilómetros del lugar desde que era reclamado.

El desmantelamiento del CICU en Alicante, situado junto al hospital general, se produjo el pasado 11 de enero. Dos días antes, trabajadores del servicio, colectivos y el PP, encabezado por su presidente regional Carlos Mazón, se concentraron ante ese hospital en protesta por la centralización del CICU en Valencia y su desmantelamiento en Alicante, porque consideraban que suponía una merma a la capacidad de reacción y a la atención urgente.

Ahora, el portavoz de Sanidad del Partido Popular en las Cortes Valencianas José Juan Zaplana ha sostenido que la reorganización del servicio de Emergencias «impuesta por Ximo Puig ya está provocando el caos en Alicante». Para José Juan Zaplana «estamos viendo las consecuencias de gestionar las emergencias de Alicante a 170 kilómetros de distancia».

Además, ha recordado que la decisión de centralizar el CICU en Valencia se adoptó «en contra del criterio de los trabajadores» y ha recordado también que el candidato popular a la Generalitat Carlos Mazón se ha comprometido a descentralizar de nuevo el servicio y trasladarlo a la provincia de Alicante, como estaba antes.

Por su parte, la vicesecretaria de Políticas Sociales del PP en la provincia de Alicante Loreto Serrano, que es además alcaldesa del municipio de Santa Pola, junto a Elche y cerca de Guardamar y Rojales, se ha manifestado de modo muy gráfico al respecto: «Es de locos pensar que se puede gestionar una urgencia desde Valencia, donde no conocen las peculiaridades de nuestro terreno, y cuando una vida depende de que se llegue unos minutos antes o después».