OkBaleares

La entrega de trofeos pone fin a la Diada de Vela Llatina

La edición de 2024 ha supuesto un récord de participación, con 51 embarcaciones

El conseller de Medi Ambient Pedro Bestard, subió ayer a bordo de la Balear

"La vela latina es un emblema para Mallorca y los mallorquines"

Punto final a la Diada de Vela Llatina del Club Nàutic Cala Gamba. La gran vencedora en este evento es sin duda la navegación tradicional. La Diada, las regatas de barcos de vela latina que puso en marcha Cala Gamba hace ahora 28 años, ha tenido un papel decisivo en el aumento del interés por estas pequeñas barcas que antes se enfrentaban a inciertos destinos como acumular polvo en un almacén o incluso la hoguera en el peor de los casos. Sin las regatas, sin la Diada que este año ha alcanzado una cifra récord de 51 barcos participantes, probablemente no habría cambiado el rumbo.

El conseller de Medi Ambient del Consell de Mallorca, Pedro Bestard, que ha subido a bordo de la Balear en esta jornada, destacaba al final de la Diada: «El Consell de Mallorca siempre apoyará estas actividades. La vela latina es un emblema para Mallorca y los mallorquines». Por su parte, la presidenta de la Federació Balear de Vela, Cati Darder, que ha participado en la Diada navegando con la Alzina lo explicaba así: “La Diada de Vela Llatina es un auténtico homenaje que sirve para explicar de dónde venimos y la esencia del deporte de la vela aquí en Baleares”.

El plato fuerte de la segunda y última jornada de regatas de la Diada fue la parada naval para celebrar los cien años de vida de la Balear. Todas las embarcaciones que participan en el evento han dado dos vueltas alrededor de la homenajeada frente a la catedral antes de la competición. Después, una sola prueba en todas las categorías sería la que pondría el nombre a los ganadores de la edición de este año.

Otra de las razones de ser de la Diada de Vela Llatina es dar a conocer la navegación tradicional balear en otros sitios y conocer también experiencias similares en otras comunidades. Con este fin, cada año se invita a una embarcación de otra comunidad. En esta ocasión, ha navegado en la Diada una dorna polbeira gallega, la Sobrada. Uno de sus tripulantes, Ángel Iglesias, contaba cómo han vivido su experiencia en Mallorca: “Ha sido una experiencia muy enriquecedora. Veníamos a Mallorca con la incertidumbre de lo que iba a pasar pero la acogida ha sido espléndida. Me quedo con el recibimiento y el cariño de la gente”.

En el aspecto meramente deportivo, la segunda jornada de la Diada ha puesto ya nombre a los ganadores en las diferentes divisiones. Vientos de hasta 16 nudos no se lo pusieron fácil a estas pequeñas embarcaciones en la jornada final. El vencedor en el grupo de Vela Llatina Clàssica ha sido el Uep, de Jaime Vidal, tras imponerse en las dos pruebas disputadas en esta división. El Ventolina de Jaume Durán ha sido el mejor en la clasificación general en la clase Regata. En Llaüts Clàssics se ha llevado el título el Savanna, de Toni Jover. En el grupo Dragonera, se ha llevado la victoria el Mitjana, con Gabriel Català como patrón, que ha ganado las tres pruebas de esta clase. Por último, ya en las categorías no competitivas, el andritxol Posidonia de Alfonso García ha sido el primero en la clase Oberta, mientras que en la división Oberta de Llaüts Clàssics se ha impuesto el Primero, de Bernat Oliver, empatado a puntos con el Boeres, de Mare Mar Fundació.

Por otro lado, el premio Mestre Miquel Llompart, que reconoce la trayectoria vital de personas y entidades en favor de la navegación tradicional ha sido este año para la Associació de Barques Tradicionals de Portocolom, que ha dado un gran impulso a la difusión de la vela latina en esta localidad en los últimos años.

Uno de los vocales del Club Nàutic Cala Gamba además de barítono, Cristófol Romaguera, fue el encargado de poner el broche final a la Diada de este año cantando La Balanguera.