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Detenidos dos jóvenes marroquíes por robar violentamente patinetes y móviles en el centro de Zaragoza

Los detenidos tienen 19 y 20 años, y suman 24 antecedentes policiales entre los dos

Dos jóvenes marroquíes han sido detenidos como presuntos autores de varios robos con violencia en el centro de Zaragoza. Se trata de dos varones de 19 y 20 años que, entre los dos, sumaban más de una veintena de antecedentes policiales.

Los robos los realizaban acercándose a sus víctimas con el pretexto de alguna pregunta que les hacían para sorprenderles y llevarse con violencia sus pertenencias. Además llevaban a cabo sus robos a plena luz del día.

Los detenidos cuentan con numerosos antecedentes policiales pese a su juventud. Uno de ellos tiene quince antecedentes policiales, y la otra persona, nueve. Los dos marroquíes fueron puestos horas después a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia, quien decretó su puesta en libertad con cargos tras ser oídos en declaración.

Los robos de los dos marroquíes a plena luz de día en Zaragoza

La detención de estos dos presuntos delincuentes se produjo después de que agentes de la Jefatura Superior de Policía de Aragón recibieran un aviso el pasado sábado en torno a las 13:30 horas, gracias a la llamada de un joven al teléfono 091, de la Policía Nacional, correspondiente al Centro Inteligente de Coordinación Mando y Centro (CIMACC), para denunciar el robo que acaba de sufrir su hermano en pleno centro de Zaragoza, en la calle Conde Aranda.

Según manifestaba el joven, tenía localizados a dos individuos que acaban de robar con violencia su hermano. Tal y como explicó la víctima, hacía escasos minutos que dos individuos le habían parado en mitad de la calle para preguntarle dónde se había hecho el corte de pelo.

Con la excusa, en un momento dado, los dos jóvenes marroquíes se le habían acercado más para amedrentarle y habían empezado a vacilarle manipulando su patinete, llegando a arrancarle el teléfono móvil del brazalete donde lo llevaba, además de intentar llevarse su patinete por la fuerza.

Tras un violento forcejeo, la víctima consiguió finalmente zafarse y que no le robaran también el patinete, pudiendo huir hacia un portal de una vivienda cercana para refugiarse, desde donde pidió ayuda a su hermano.

El hermano localizó rápidamente a los presuntos autores de los hechos, que seguían en las inmediaciones donde se acababa de producir dicho forcejeo, y llamó a la policía sin perderlos de vista.

Según indican fuentes policiales, precisamente hacía escasas unas horas antes, en la misma zona, esta patrulla policial había sido requerida debido a que dos menores habían denunciado haber sufrido un robo con violencia de sus patinetes por parte de dos jóvenes cuya descripción física coincidía plenamente con la de los presuntos autores de este segundo robo, por lo que procedieron a su inmediata detención por ambos hechos delictivos y posterior traslado a dependencias policiales.

En el momento de realizar el cacheo de seguridad, los agentes localizaron entre sus pertenencias, diversas herramientas, como palanquetas, alicates y una cizalla, que fueron intervenidas para poder realizar las gestiones oportunas, al no justificar los detenidos su procedencia y ante la posibilidad de que pudieran haberlas utilizado para cometer algún tipo de ilícito penal.

La necesidad de la comisaría en el Casco Histórico

Los robos con violencia de estos dos jóvenes marroquíes en pleno centro de Zaragoza y a luz del día, evidencia la escala de delincuencia que los vecinos del ciudad están sufriendo. Como consecuencia de ello, varias asociaciones vecinales, en este caso en el barrio del Gancho, donde estos jóvenes cometieron los robos, así como la Junta del Distrito Casco Histórico, exigieron hace meses la instalación de una comisaría de policía local, algo que, según parece, pronto verá la luz.

Al menos ese es el acuerdo al que llegó PP con Vox, el impulsor de esta iniciativa el pasado septiembre, para sacar adelante los presupuestos de este año. Un proyecto que cuenta con una partida presupuestaria que supera los 300.000 euros.

El objetivo es recuperar la presencia permanente de la policía local en zonas puntuales, como instaló siendo alcaldesa Luisa Fernanda Rudi (PP) y que desmanteló el socialista Juan Alberto Belloch cuando llegó a alcalde. En el barrio del Gancho, se encontraba en la calle doctor Palomar, que además contaba con una delegación policial en la calle de San Pablo.