Andalucía

Mueren ahogados cuatro inmigrantes ilegales tras ser lanzados al mar de Cádiz por los traficantes

Los inmigrantes ilegales fueron arrojados al mar cuando llegaron a la costa

Otras tres personas están hospitalizadas con cuadros de hipotermia

La avalancha de inmigrantes ilegales se ha cobrado cuatro víctimas mortales este miércoles. Cuatro personas que viajaban en una embarcación semirrígida fueron arrojados de ella al mar al llegar a la orilla y han muerto en la playa de Camposoto, en el término municipal de San Fernando (Cádiz). Además, otros tres inmigrantes que también fueron arrojados en la orilla en de Sancti Petri, en Chiclana de la Frontera, han sido hospitalizados al presentar un cuadro de hipotermia. Es una nueva tragedia que se cobra la inmigración ilegal, ocultada y blanqueada por un Gobierno que sigue sin poner fin al efecto llamada y que sigue trasladando a cientos de inmigrantes semanalmente a distintos puntos de la península.

Según ha informado la Subdelegación del Gobierno, en la embarcación que ha llegado a la orilla de la playa de Camposoto viajaban un total de 27 inmigrantes ilegales, de los que 23 han podido ser auxiliados y cuatro han fallecido trágicamente. Por su parte, en la embarcación llegada a Sancti Petri, en Chiclana, viajaban un total de ocho inmigrantes magrebíes varones mayores de edad, que han sido atendidos por personal sanitario y la Guardia Civil. Tres de los inmigrantes auxiliados han tenido que ser evacuados en ambulancia al hospital de Puerto Real por presentar cuadro de hipotermia.

En el dispositivo trabajan Salvamento Marítimo con embarcación y helicóptero, efectivos de la Policía Nacional, así como la Guardia Civil tanto por tierra como con el Servicio Marítimo con una embarcación.

Es una nueva tragedia que se suma a la que viven diariamente los cientos de inmigrantes ilegales que siguen llegando a las costas andaluzas. Los guardias civiles que trabajan en las costas llevan meses advirtiendo de que una tragedia de este tipo iba a acabar sucediendo, ya que las mafias tratan a estos seres humanos como mercancía y dado que la Guardia Civil no dispone de medios suficientes para abordar una situación migratoria tan crítica como la que atraviesa nuestro país.