Andalucía

Los socios de Sánchez homenajean al asesino de ETA que mató a un militar en Córdoba: «Bienvenido a casa»

Mientras el Gobierno socialcomunista de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias pactan con EH Bildu el futuro de España, miembros de la formación nacionalista vasca celebran la salida de prisión del etarra Asier Ormazabal, que asesinó en 1996 en Córdoba al militar Miguel Ángel Ayllón al hacer explotar el autobús en el que iba junto a más compañeros.

Quien ha liderado el homenaje por parte de Bildu es su europarlamentario, Pernando Barrena. Tras salir el etarra de la cárcel de Teruel, fue recibido con los honores propios de quien es un héroe por ser un asesino. En definitiva, por ser de ETA. Esa ETA que nos cuentan que ya ha desaparecido, pero que sigue viva con actos y homenajes de este tipo, en los que se vanagloria a quien ha acabado con la vida de un inocente por el mero hecho de pensar diferente.

«Ongi etorri etxera Asier (bienvenido a casa Asier», ha tuiteado el representante de EH Bildu en el Parlamento Europeo.

Las calles de Hernani han vuelto a ser testigos este finde de semana de un ongi etorri que ha indignado a los colectivos de víctimas del terrorismo. Un pasillo de honor formado por simpatizantes de ETA que han aplaudido a Asier Ormazabal, alias El Niño, que cuenta entre su hoja de servicios criminal a la banda terrorista el intento de masacre contra un convoy militar en Córdoba.

Ormazabal fue condenado a 351 años por un asesinato, el del sargento del Ejército de Tierra Miguel Angel Ayllón, y por las heridas graves al capitán Antonio Duque Lozano y al alférez Antonio Granados Bermejo. Además, se le consideró autor del asesinato en grado de tentativa contra el resto de ocupantes del autobús, en mayo de 1996.

«¡Uno menos!»

El comando de Ormazabal había colocado tres explosivos en la zona donde iba a transitar el vehículo militar, a cuyo paso detonaron y provocaron una gran deflagración. Los efectos pudieron ser mucho peores aún de los conseguidos, pero el atentado no salió como esperaban.

El Niño de ETA ha quedado libre este fin de semana en la cárcel de Teruel, a donde fue a esperarle y recogerle parte de su familia y simpatizantes del colectivo proetarra Etxerat. El recién liberado se fotografió con una bandera vasca, imagen que fue difundida por esta plataforma con el mensaje «¡Uno menos! El etarra cumplía condena en Francia por otro asesinato, fue extraditado en 2002, condenado en 2004 a 351 años más y puesto en libertad en 2020.