Andalucía
Terrorismo yihadista

Expulsado de España un pakistaní que se preparó para cometer un atentado yihadista en Sevilla

La Audiencia Nacional ha condenado a un varón pakistaní detenido en Sevilla en 2021 a cuatro años de prisión por delitos de enaltecimiento terrorista y de autoadoctrinamiento y recepción de adiestramiento militar.

El acusado, Shafqat R.K., se radicalizó en redes sociales y manifestó su disposición a cometer un atentado yihadista en la capital andaluza. «Residente de larga duración en España», recibió en 2021 entrenamiento militar en Pakistán y a su vuelta a España intentó conseguir armas con la que «hacer la yihad en Sevilla».

El investigado ha llegado este miércoles a un acuerdo de conformidad con el fiscal, que ha rebajado su petición inicial de seis años y medio de cárcel ante la confesión de los hechos por parte del inculpado. Tras su arresto por parte de la Guardia Civil, ha permanecido en prisión provisional desde el 23 de diciembre de 2021.

La presidenta de la Sala le ha comunicado que a la vista de este acuerdo se le condena a cuatro años de prisión y a dos de libertad vigilada, si bien las penas se sustituirán por su expulsión a Pakistán cuando concluya el correspondiente expediente administrativo, con la prohibición de que vuelva a España en diez años.

Radicalización y entrenamiento militar

De esta forma, la sentencia recogerá como hechos probados los explicados por el fiscal en su escrito de acusación, en el que se detalla que Shafqat R.K. reside en España desde el 30 de abril de 2020, y en 2021 «se había autoadoctrinado en la idea de la yihad». Para esa radicalización, el primer paso fue «la difusión de las imágenes de lo que consideran la auténtica verdad».

La Fiscalía apunta como «evidencia» de ello las publicaciones, a partir del 16 de junio de 2020, de sucesivos vídeos en un perfil de Facebook gestionado por el investigado y en TikTok.

En esta última plataforma publicó el 7 de julio de 2021 un vídeo de un atentado protagonizado por un policía pakistaní que asesinó a un hombre que había resultado absuelto de blasfemia por un comentario en Facebook. La imagen tenía superpuesto un texto que decía: «El único castigo para un blasfemo, decapitación». De fondo, un audio con versos incitando a atentar contra Estados Unidos.

Al ver esta publicación, una agente informático encubierta entabló comunicación con el acusado, que le mostró su «alineación con las tesis que justificaron dicho acto terrorista» y su «disposición a la participación en acciones de este tipo», según consta en el escrito de conclusiones provisionales del Ministerio Público. «Podemos decapitar y decapitar por el honor del santo profeta», le llegó a comentar, justificando estas acciones como una forma de llevar el Islam «al primer plano».

En otra de esas conversaciones también reconoció a la agente su compromiso con la guerra santa: «Los musulmanes deberían hacer la yihad porque el Corán también dice yihad, y ésta es la diferencia entre nosotros y los incrédulos».

Poco después, entre agosto y octubre de 2021, se desplazó a Pakistán, donde recibió entrenamiento militar «como paso esencial en su idea de autocapacitarse para la yihad violenta y pasar a la acción».

A su vuelta a España «buscó adquirir armas que le permitiesen realizar un hecho violento». En el registro de su vivienda tras su detención se le intervino el móvil en el que se hallaron imágenes que acreditaban su estancia en Pakistán y su entrenamiento militar. Además, guardaba gran cantidad de fotografías de armas y conversaciones en WhatsApp encaminadas a la compra de armamento.

Preguntado por la agente sobre su disposición a «hacer la yihad en Sevilla», el acusado respondió afirmativamente. Shafqat R.K. no podrá entrar en territorio nacional en los próximos diez años.