Andalucía
Inmigración ilegal

Cerca de 300 inmigrantes ilegales intentan entrar a nado a Ceuta desde Marruecos en una nueva avalancha

La Guardia Civil ha interceptado a unos 80, que están siendo devueltos al país vecino

Más de una decena de menores se han quedado en la ciudad

Cerca de 300 inmigrantes ilegales han intentado acceder a nado a Ceuta desde Marruecos en el último episodio de presión migratoria en la frontera. Más de una decena de menas se han quedado en suelo español y el resto de interceptados, unos 80, están siendo devueltos al país vecino, pero «hay más marroquíes deambulando por la ciudad y se les está buscando», según apuntan a OKDIARIO fuentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE).

La avalancha arrancó en torno las 23:00 horas. Decenas de personas se lanzaron al agua para intentar cruzar a nado el espigón de la frontera del Tarajal que separa Marruecos de Ceuta. La Comandancia de la Guardia Civil movilizó a todos sus agentes, en la que ha sido una de las madrugadas con mayor presión migratoria que se recuerda en la ciudad autónoma. El aluvión se ha prolongado hasta pasadas las 5:00. Durante más de seis horas, el Servicio Marítimo de la Guardia Civil y Salvamento Marítimo han localizado y sacado del agua a decenas de inmigrantes ilegales, mientras otros seguían echándose al mar, algunos con flotadores e incluso con trajes de neopreno.

Esta vez sí, la Gendarmería Real marroquí ha colaborado durante la jornada de «intenso trabajo» para frustrar los intentos de acceso a orillas españolas, según ha trasladado la Guardia Civil a Europa Press. Los interceptados serán devueltos al país vecino previa identificación y filiación de la Policía, conforme a los acuerdos bilaterales en materia de migración, si bien la actitud de Marruecos al respecto es más bien cambiante.

El destino de los inmigrantes

Aunque la comandancia se resiste a indicar el número de inmigrantes que han conseguido entrar en Ceuta y que actualmente se encuentran de camino a centros de menores o al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), fuentes de las FCSE cifran la avalancha en unas 300 personas.

Los agentes continúan vigilantes en la zona fronteriza para prevenir nuevos intentos de entrada ilegal a lo largo de este lunes. De producirse, los efectivos de la Guardia Civil tendrían que actuar «sin que la plantilla descansara», según denuncian las citadas fuentes, dado que «llevan más de 12 horas seguidas de servicio desde que fueron alertados».

El destino de los inmigrantes depende de su edad y su nacionalidad. Los menores deben ser acogidos en los diferentes centros, sin importar su país de origen, mientras que los adultos marroquíes son devueltos a su punto de partida. Aquellos con cualquier otra nacionalidad -en su mayoría argelinos o subsaharianos- son acogidos en España.

Durante la madrugada de este lunes también han intervenido varios equipos de Cruz Roja, que han atendido a los inmigrantes que han logrado poner un pie en la arena ceutí. Aunque tampoco detallan cifras sobre las personas asistidas, sí confirman a Europa Press que la mayoría presentaba, como de costumbre, cuadros de hipotermia.

La presión migratoria viene siendo constante en las jornadas de guardias nocturnas para quienes patrullan las costas de Ceuta, especialmente en días de niebla. La semana pasada también estuvo marcada por intentos de entrada frustrados y accesos a Ceuta desde Marruecos, en su mayoría a nado (aunque contabilizados como vía terrestre por el Gobierno). Una veintena de varones argelinos y marroquíes, nueve de ellos menores, lograron entrar en la ciudad autónoma durante la madrugada del 4 de agosto, y en la noche siguiente lo consiguieron otros dos adultos procedentes de Argelia, según confirmó la Guardia Civil.