‘El cuco de cristal’: una serie entretenida pero que carece de toda lógica
Crítica de la serie basada en la novela de Javier Castillo
La película de Zelda presenta sus dos primeras imágenes oficiales: es el casting perfecto del videojuego
Ni 'La sociedad de la nieve' ni 'Lo imposible': las 10 películas más vistas de la historia de Netflix
Crítica de El cuco de cristal, nuevo éxito de Netflix que se estrenó el pasado 14 de noviembre y que ya es de las series más vistas de la plataforma. Basada en el best-seller de Javier Castillo (con 2,5 millones de copias vendidas), esta miniserie de 6 capítulos es entretenida pero, vista entera, carece de toda lógica narrativa. La trama está dividida en dos tiempos pero, al final, uno de ellos (el de la actualidad) queda absolutamente desdibujado y no se explica su existencia. Y aunque la realización es correcta, el ritmo trepidante y los actores, en general, están bastante bien, la inconsistencia de un relato tan previsible provoca que el espectador se pregunte de qué ha servido todo lo que ha visto. ¿Por qué se llama El cuco de cristal? En la novela se explica pero en la serie no. Eso es un gran problema.
Sinopsis y datos de producción
El cuco de cristal narra la historia de Clara Merlo (Catalina Sopelana), médico residente de primer año, que sufre un infarto fulminante. Un trasplante de corazón le da una segunda oportunidad, pero también despierta en ella una inquietud imposible de ignorar: necesita saber quién fue su donante. Su búsqueda la lleva a un pequeño y enigmático pueblo, donde descubre que el corazón que ahora late en su pecho pertenecía a un joven envuelto en una tragedia aún no resuelta. La llegada de Clara al pueblo marcará el inicio de una serie de acontecimientos que pondrán al descubierto un pasado que muchos creían sepultado para siempre.
Esta nueva serie de seis episodios producida por Atípica Films, está basada en el bestseller del escritor español Javier Castillo, con 2.500.000 de ejemplares vendidos y publicado por Suma (Penguin Random House). Jesús Mesas y Javier Andrés Roig (La chica de nieve, Estoy vivo) son los encargados de esta adaptación a la pantalla que dirigen Laura Alvea (Ánimas) y Juan Miguel del Castillo (La novia gitana).
El cuco de cristal está protagonizada por protagonizada por Catalina Sopelana (El jardinero, El vecino), Alex García (Sagrada familia, El inmortal), Itziar Ituño (Berlín, La casa de papel), Iván Massagué (El hoyo), Alfons Nieto (El cuerpo en llamas, Élite) y Tomás del Estal (Clanes)
Decisiones sin sentido
Siempre que se habla de una adaptación hay que repetir lo mismo: tanto el literario como el audiovisual son lenguajes distintos. Las comparaciones aquí son estériles, si no te gusta la serie o la película porque crees que se ha traicionado el texto original, no pasa nada, el libro va a seguir existiendo.
El problema surge cuando, en el proceso de adaptación, se toman decisiones incomprensibles que no hacen más que enturbiar la historia. Este es el caso de El cuco de cristal.
Entiendo, como pasó con La chica de nieve y El Juego del alma (basadas también en la obra de Javier Castillo), que la acción pase de Estados Unidos a España. Esto puede condicionar algo el desarrollo de la trama pero por una cuestión de producción es algo comprensible que no molesta.
Como casi todas las historias de Castillo, el arranque es complejo y la resolución algo obvia, por no decir previsible, aunque el interés nunca se pierde. En El cuco de cristal la trama se divide en dos tiempos, en 2004 y 2023. Por cierto, que cada vez que haya un salto de época se tenga que poner un cartelito (¡durante toda la serie!) es como llamar tonto al espectador. Pero bueno, ese no es el problema.
¿Por qué se llama El cuco de cristal? He visto la serie entera y no lo sé. Hablan de ese pájaro al principio y uno de los personajes tiene la enfermedad de los huesos de cristal, supongo que será por eso pero, en realidad, no tengo ni idea.
Lo más grave es que, terminado el último capítulo, pienso que si la trama de la actualidad, la de la doctora a la que le han trasplantado el corazón, hubiera desaparecido no pasaría nada. ¿Qué aporta? ¿Qué necesidad tiene esa chica de meterse en todo ese misterio?
Las dos tramas principales no están ensambladas de manera efectiva y se quedan miles de cabos sueltos. Sin hacer muchos spoilers dejo aquí algunas preguntas sin resolver: ¿A dónde van los miedos de, por ejemplo, el hermano Guardia Civil que cree que puede ser violento? ¿Por qué se llevan a un bebé al principio? ¿Por qué se crean esos movimientos rituales como de pájaro? ¿Para qué la máscara?
Por otro lado, me gustan las localizaciones y los actores, en su gran mayoría, están estupendos y defienden unos personajes que, en muchos casos, carecen de motivaciones concretas. Me quedo, sobre todo, con Catalina Sopelana, Alex García y Alfon Nieto (todo un galán que recientemente ha demostrado su gran talento en la infravalorada El gran salto -atresplayer-).
De todas maneras, vi El cuco de cristal del tirón en una tarde. Me quedé con una sensación de vacío absoluto pero el camino fue divertido. Esto es algo que no se puede decir de muchas series.
Lo último en Televisión, cine y series
-
La película de Zelda presenta sus dos primeras imágenes oficiales: es el casting perfecto del videojuego
-
Ni ‘La sociedad de la nieve’ ni ‘Lo imposible’: las 10 películas más vistas de la historia de Netflix
-
‘El cuco de cristal’: una serie entretenida pero que carece de toda lógica
-
Ana Rosa carga como nunca contra el Gobierno de Sánchez: «Esta legislatura nació muerta»
-
Ryan Coogler confirma que ‘Black Panther 3’ es una realidad: «Estamos trabajando en ella»
Últimas noticias
-
Trump admite por primera vez que no descarta «desplegar tropas en Venezuela» ni «hablar con Maduro»
-
Alemania y Holanda cierran su clasificación para el Mundial 2026
-
El fin de semana de lujo de Pedro Sánchez no nos sale gratis
-
Las fotos de Sánchez y Begoña disfrutando de un fin de semana en la elitista Baqueira Beret
-
ONCE hoy, lunes, 17 de noviembre de 2025: comprobar el Cupón Diario y Super 11