Sucesos
Bandas latinas

Las órdenes del líder de los Latin King: «Ubica y rastrea a todos los ‘gajos’ que andan por ahí»

El servicio de Información de la Guardia Civil investigó durante meses a Eric Javier Velastegui Jara, conocido como King Wolverine y líder de los Latin King en España, encarcelado desde 2003 en la prisión coruñesa de Teixeiro por la violación de una mujer en Madrid. Desde la cárcel daba órdenes a su segundo al mando, Tatam, para intentar reorganizar la banda y negociar con el Consejo de Corona de Chicago, que los había expulsado y declarado como «torcidos», es decir, en rebeldía. «Ubica y rastrea a todos los ‘gajos’ (facción) que andan por ahí», llegó a ordenar en una de la conversaciones intervenidas por la Guardia Civil, que bautizó la operación policial como Operación Torcidos.

La Guardia Civil comenzó a investigar la reorganización de Latin King en junio de 2022 después de que se recibiese la denuncia del director de un instituto en una localidad del norte madrileño que denunció el intento de captación de menores para la banda. La sorpresa llegó cuando descubrieron que entre estos «captadores» estaban viejos miembros de una banda que se suponía desactivada e ilegalizada desde 2012.

Los agentes comenzaron los seguimientos y llegaron a grabar una reunión el 23 de diciembre de 2022 en la Plaza de España de Madrid en la que preparó una «acción de venganza» presuntamente contra King Klemas, el nuevo líder de la facción oficialista, avalado por la dirección de los Latin King en Chicago. A esa reunión acudieron King Rata, Bill, Chico Loco y Stone. Poco después se unió a la reunión Tatam, el segundo al mando de los Latin. Curiosamente, la Policía Municipal de Madrid identificó a varios de ellos, una imagen que fue captada por la Guardia Civil.

Conversaciones

En realidad, según la investigación Eric Velastegui tenía la intención de tomar el mando estatal de la organización cuando saliese de la cárcel. La Guardia Civil intervino varias conversaciones de Velastegui con Tatam, su lugarteniente, entre éste y King Fausto, King Rasputin y King Misterio, entre otros. Eric hizo dos llamadas el 8 de enero, otras dos el día 10 y luego varias los días 19, 20 y 24 de enero. En estas llamadas Eric insistía en que los nuevos miembros debían saberse la «literatura» de la banda, un conjunto de normas escritas de obligado cumplimiento.

King Wolverine también ordenó desde la cárcel a su lugarteniente Tatam «ubicar y rastrear a todos los gajos que andan por ahí, donde tiran, donde andan… es el último chance, el que se quiera abrir que se abra pero luego no va a venir a decir yo soy King, va a tomar fotos… no no, el que se abre será expulsado». Se refería Velastegui a la ruptura de cuatro «reyes» que no admitían su autoridad y acudieron a la casa madre de los Latin King en Chicago, de quien recibieron la bendición para asumir el liderazgo de los Latin King en España. Velastegui pretendía saber quién estaba de su parte y quién no. Los «gajos» eran la facción de los Latin que intentaba formar un grupo aparte.

El lider de la nueva facción era King Klemas. Fue el 1 de diciembre de 2022, cuando Velastegui llamó a su pareja Luna explicándole los intentos de llegar a un acuerdo con ellos, cuando la Guardia Civil tuvo constancia de esta ruptura y posterior intento de reunificación que de momento no ha fructificado. Se cree que cuatro «reyes», King Klemas, King Pablo, King Viciosi y King Latin, se han convertido ahora en testigos protegidos en esta causa que lleva un Juzgado de Collado Villalba.

También de esta conversación los investigadores extrajeron que en el acuerdo entre las dos facciones estaría mediando uno de los líderes mundiales de los Latin King, reconocido con el alias de Popeye, a quienes nombran Tatam y otro líder de los Latin King españoles partidario de Wolverine, King Tercero.

Incluso Tatam y Eric Velastegui se vieron en persona entre el 24 y el 28 de noviembre de 2022 cuando Wolverine disfrutó de un permiso penitenciario. Los investigadores incluso detallaron los gastos de aquel desplazamiento del lugarteniente de Velastegui, 1.000 euros en total, que los agentes creen que salió del dinero recaudado por la organización.

Ruptura

Los agentes de la Guardia Civil desconocían las causas de la ruptura, hasta que comprobaron que la facción «oficial» comandada por Eric Javier Velastegui Jara, conocida como Sagrada Tribu América Spain (STAS) había sido expulsada por el Consejo de Corona de Chicago (Madre Tierra), los líderes a nivel internacional de la banda. Lo hicieron porque su líder español estaba en la cárcel acusado de infringir uno de los principios básicos de los Latin King, estar condenado por una agresión sexual.

La ruptura con el resto de los Latin King españoles se hizo porque no rendían cuentas a los líderes en Estados Unidos y por ello decidieron desde Estados Unidos reconocer a la nueva facción. Pero «los torcidos» o rebeldes decidieron seguir a King Wolverine, preso en la cárcel y a quien le quedaban apenas tres años para salir de la prisión de Teixeiro (La Coruña). Al frente de los Latin King «expulsados» se quedaron Tatam, King Rata, King TerceroKing YasKing StoneChicolocoMetrallaLuna y King Joker.

De momento, sólo el líder, Velastegui, está en prisión. El resto quedó en libertad por su nulo riesgo de fuga, aunque se les impuso medidas cautelares. Todos están acusados de pertenencia a organización criminal, y solo algunos de lesiones, amenazas, robo con violencia y tráfico de drogas. El prestigioso penalista Víctor Joel Salas explica a OKDIARIO que «son ciudadanos españoles ya de tercera o cuarta generación, así que el juez ha considerado el arraigo familiar como importante y que no existe riesgo de fuga ni de destrucción de pruebas, todos tienen trabajo en España y no parece que cuatro machetes sean suficientes para iniciar una guerra entre bandas, ya que no hay armas de guerra ni de fuego que se hayan incautado». Salas explicó que «las medidas alternativas a la prisión son adecuadas porque garantizan el proceso, la prisión provisional no es un castigo, sino una cautelar para garantizar el procedimiento».

Ahora, los 16 detenidos en la «operación Torcidos» tienen que ir a firmar a los juzgados cada 15 o 7 días, según los casos. Salas explica que «muchos de estos jóvenes tienen entre 20 y 30 años y no sabían que el Tribunal Supremo declaró como organización criminal en 2012 a los Latin King, por eso sería importante que la Comunidad de Madrid hiciese labores de prevención y de resocialización de estos jóvenes».