Sociedad
Embarcados en el 'Datillo'

Una organización humanitaria italiana a bordo de la flota del ‘Aquarius’: «Ha sido muy estresante»

Es uno de los ejemplos de asistencia humanitaria que ONG´s y asociaciones han prestado a los 629 inmigrantes llegados este domingo a España. Un equipo sanitario del Cuerpo italiano de ayuda de la Orden de Malta ha viajado a bordo del Dattilo, barco guardacostas de la Capitanía de Puerto, para atender a parte de los pasajeros que llegaban este domingo dentro de la flota del Aquarius. La portavoz de esta orden laica con 900 años de historia, Marina Balfour, ha contado a OKDIARIO algunos detalles de este dispositivo.

«Nuestra orden llevaba en este barco de la Guardia Costera de Italia a la doctora Maria Rita Agliozzo y a la enfermera Marika Giustiniani, embarcaron el martes, y han hecho cinco días con una navegación con mar gruesa y junto a 274 pasajeros a bordo del barco de búsqueda y rescate de la ONG SOS Méditerranée», explica Balfour.

Un viaje que no ha sido sencillo ya que el ‘Datillo’ era el barco en el que sus pasajeros presentaban más problemas de salud: «Seguramente ha sido una situación difícil y muy estresante para los médicos, pero estas profesionales tienen experiencia en la Marina militar y la Guardia Pesquera en la atención a inmigrantes, están bastante habituadas», señala la portavoz de esta organización italiana que atiende a personas necesitadas y que cuenta con delegaciones en Valencia y otras  capitales españolas.

El Cuerpo italiano de ayuda de la Orden de Malta presta desde 2008 atención sanitaria en alta mar, al estilo del Salvamento Marítimo español. Lo hacen a bordo de las embarcaciones de los guardacostas italianos. También trabaja en la isla de Lampedusa, de donde parten las patrulleras hacia los lugares indicados por el IMRCC (Centro de Salvamento Marítimo Italiano) en Roma. Sus miembros acuden a las emergencias humanitarias en el Mediterráneo.

Y así lo hicieron con motivo de la crisis del Aquarius Sus profesionales acudieron inmediatamente a Pozzallo, al sur del país, donde embarcaron para viajar hasta las aguas internacionales entre Malta y Sicilia, para embarcarse en el Datillo: el primero de los tres barcos llegados este domingo a España.

Y han participado en un operativo complicado y «bajo una enorme presión mediática», pero que han resuelto de forma sobresaliente, señala Balfour.»La doctora Agliozzo y la enfermera Giustiniani ya han actuado en varias situaciones de emergencia sanitaria en las aguas entre Libia e Italia, a bordo de los barcos guardacostas y se han manejado muy bien», asegura.

La responsable de esta organización de ayuda humanitaria que asiste a personas desfavorecidas desde el testimonio y defensa de la fe (su lema es Tuitio Fidei) destacaba a este periódico cómo la Orden de Malta se ha implicado pese al rechazo del Gobierno de Italia a acoger a los náufragos: «Somos una organización apolítica y no vamos a entrar en las decisiones de los políticos, lo que hemos hecho es asistir a los que lo necesitaban como esta orden lleva haciendo desde hace siglos».

Ante la pregunta de si cree que algunos de los recién llegados, a los que por ejemplo se ha ofrecido a acoger Francia, podrán intentar volver a entrar en su país, Mariana Balfour concluye:»Colaboramos con refugiados de Siria, Sudán o la República del Congo, no lo sabemos, y no es nuestra tarea. Este es un problema planetario sobre el que tienen que tomar medidas y ponerse de acuerdo muchos países».