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El emotivo gesto de Carla Goyanes: cumple la promesa que le hizo a su hermana Caritina

Carla Goyanes ha pasado un año muy complicado

Carla Goyanes está cuidando a los hijos de su hermana Caritina

Se está portando muy bien con su madre, la glamurosa Cari Lapique

La familia Goyanes ha atravesado uno de los momentos más difíciles de su historia reciente. La pérdida de Caritina Goyanes y su padre, Carlos Goyanes, en un corto intervalo de 19 días debido a problemas cardíacos inesperados, marcó un antes y un después para sus seres queridos. Sin embargo, en medio de este dolor han surgido actos de amor y solidaridad que están ayudando a la familia a reconstruirse. Uno de estos gestos es el compromiso inquebrantable de Carla Goyanes, la hermana menor de Caritina, quien ha hecho de una promesa un homenaje constante. Nosotros lo sabemos todo.

El pasado verano la familia Goyanes enfrentó una pérdida doblemente desgarradora. Caritina Goyanes, figura clave en su entorno familiar y profesional, falleció dejando un vacío enorme en sus hijos, su marido  Antonio Matos, y su madre, Cari Lapique. Su muerte, apenas semanas después del fallecimiento de su padre, Carlos Goyanes, sumergió a la familia en un duelo profundo.

No obstante, la familia ha encontrado la fuerza para continuar, apoyándose mutuamente y honrando la memoria de sus seres queridos. Antonio Matos, viudo de Caritina, ha centrado sus esfuerzos en preservar el legado de su mujer, tanto en lo personal como en lo profesional. Su empresa, que Caritina ayudó a construir, se mantiene como un testimonio vivo de su dedicación. Matos también se ha volcado en la crianza de sus dos hijos, asegurándoles un entorno lleno de amor y estabilidad.

Una promesa cargada de significado

Carla Goyanes, profundamente afectada por la partida de su hermana, ha encontrado consuelo en las palabras que compartió al despedirse de ella. En una emotiva carta, Carla no solo ha expresado su tristeza, sino también hizo un juramento que ha guiado sus acciones desde entonces: cuidar de los hijos de Caritina como si fueran propios, apoyar a su madre en su duelo y estar presente para Antonio Matos. Estas promesas no han caído en saco roto, Carla las ha transformado en acciones concretas que reflejan su compromiso.

Carla Goyanes en Madrid. (Foto: Gtres)

La empresaria ha demostrado una vez más su voluntad de cumplir con su palabra. Junto a su sobrino Pedro, viajó a Zaragoza para asistir a un partido de fútbol en el que participaba su hijo, Carlos. Este gesto aparentemente sencillo encierra un profundo simbolismo: es una manera de fortalecer los lazos familiares y de ofrecerle a Pedro un espacio para despejar su mente y disfrutar de momentos de alegría tras la pérdida de su madre.

En sus redes sociales, Carla compartió una fotografía del evento, acompañada de un mensaje que resalta su orgullo por sus hijos y sobrinos. «Presumiendo de sobrino mientras vemos a Carlos disfrutando de su pasión», escribió. De esta forma ha dejado entrever cómo este tipo de actividades son también una forma de rendir homenaje a Caritina y de reforzar el sentido de comunidad que siempre caracterizó a los Goyanes.

Los Goyanes, una familia unida

El gesto de Carla no es un hecho aislado dentro de la familia. Cari Lapique también ha demostrado su fortaleza al acompañar a sus nietos en momentos importantes, como su primer día de colegio tras el fallecimiento de Caritina. Estas acciones muestran cómo cada integrante de la familia está contribuyendo a preservar la memoria de Caritina y a garantizar que sus hijos crezcan rodeados de amor y apoyo.

Por su parte, Antonio Matos sigue adelante con la empresa que su esposa ayudó a construir. Para él, este negocio no solo representa una fuente de ingresos, sino también un legado que desea transmitir a sus hijos. Con una visión a largo plazo, Matos ya ha expresado su intención de que sus hijos aprendan el valor del esfuerzo y la dedicación, involucrándolos en diferentes aspectos del negocio cuando llegue el momento.

A pesar de las dificultades, la familia Goyanes está demostrando que el amor y la solidaridad pueden superar incluso las pérdidas más devastadoras. Carla, en particular, ha asumido un papel fundamental al convertirse en un pilar para sus sobrinos y para toda la familia. Su compromiso de cuidar a los hijos de Caritina y de mantener viva su memoria no solo es una manera de honrar a su hermana, también un ejemplo de cómo los lazos familiares pueden fortalecerse en los momentos más oscuros. Gracias a esta unión están logrando salir adelante.

Una Navidad diferente

En cada acción, desde los pequeños gestos cotidianos hasta las decisiones más significativas, los Goyanes están reconstruyendo su vida y demostrando que el legado de quienes ya no están con ellos perdurará en las generaciones futuras.

Esta Navidad se presenta diferente para la familia. Tendrán que luchar contra dos grandes ausencias que han dejado huella, pero en el clan sigue habiendo niños, por eso Carla y el resto del entorno, en la medida de lo posible, están intentando aparentar normalidad.