Decenas de personas arropan a los padres de Julen en el tanatorio de El Palo

Los padres de Julen Roselló, el pequeño de dos años fallecido tras caer en un pozo de Totalán (Málaga) aguardan en la intimidad en el interior del tanatorio de El Palo, a escasos veinte metros de su domicilio, la llegada del cuerpo sin vida de su hijo procedente del instituto anatómico forense donde a lo largo de la mañana se le ha realizado la autopsia.

El examen forense al cuerpo del pequeño ha empezado sobre las ocho y media de la mañana y se ha alargado hasta el mediodía. Con las conclusiones de la exploración del cadáver, la Guardia Civil espera obtener más pistas sobre cómo y cuándo murió Julen, que ha estado sepultado a setenta y un metros bajo tierra durante trece días.

José y Vicky, junto a otros familiares, se encuentran acompañados de amigos y familiares además de autoridades como el alcalde de Málaga Paco de la Torre, que ha estado junto a los padres en todo momento. También se ha acercado hasta las instalaciones funerarias el número tres de la Junta de Andalucia, el consejero de la Presidencia Elias Bendodo. En los próximos minutos también se prevé la llegada del consejero de Deportes Javier Imbroda.

Hasta el tanatorio de El Palo llegan constantemente composiciones florales de instituciones, entidades y vecinos del barrio que quieren recordar con ellas al pequeño Julen que recuerdan corriendo como cualquier niño por las calles del barrio. A pocos metros de donde esta tarde se velará su cuerpo, a primera hora de la mañana, aún estaba aparcado el triciclo frente a la puerta de casa la abuela que el niño había dejado antes de la excursión a Totalán.