Series

Lo mejor y lo peor de Stephen King para la pequeña pantalla

El autor estadounidense cuenta con más de una treintena de adaptaciones

A pesar de la inesperada, aunque merecida, cancelación de La Niebla, esta semana queremos rendir homenaje a todas aquellas series de televisión inspiradas en la obra del prolífico autor Stephen King. Desde el inicio de su carrera literaria en 1974, con el clásico de terror ‘Carrie’, el escritor estadounidense ha levantado hasta la fecha casi un centenar de obras. Entre cuentos, novelas, cómics y demás composiciones. El séptimo arte ha sido, quizás, el medio que más ha aprovechado el talento y la fascinación que siempre irradian las creaciones de King, con títulos tan aclamados como ‘El resplandor’, ‘Misery’, ‘La milla verde’, ‘Cadena Perpetua’ o ‘It’.

Pero, ¿qué ocurre con la pequeña pantalla? El miedo que siempre ha caracterizado a la obra de Stephen King también ha ocupado su hueco en televisión. Alcanzando el mismo prestigio que sus antecesores cinematográficos, al menos en la mayoría de ocasiones. Con tantas obras a sus espaldas, es normal que el escritor no siempre acierte en sus adaptaciones.

Lo mejor de Stephen King

Apocalipsis

En Apocalipsis, los supervivientes de una terrible plaga mundial deben elegir entre el bien o el mal.

Esta pasará a la historia como una de las novelas más célebres del autor, adaptada a la pequeña pantalla en la década de los 90. A pesar de que Apocalipsis fue creada como una miniserie de cuatro episodios, su fidelidad a la historia original consiguió cautivar a los telespectadores de la época, convirtiéndose en todo un éxito de audiencia. Y consiguiendo, incluso, tres premios Emmy.

22/11/63

James Franco protagoniza una de las mejores adaptaciones de Stephen King.

En los últimos años, Stephen King ha disfrutado también de la versión televisiva de 22/11/63, una de sus obras más recientes. Protagonizada por James Franco, el relato sigue a un viajero del tiempo que se traslada hasta 1963 con la intención de evitar el asesinato del presidente Kennedy. La miniserie, de ocho capítulos, fue muy bien recibida por la crítica, llevando la credibilidad de la ciencia ficción a un nuevo nivel.

La Zona Muerta

La Zona Muerta permaneció en antena seis temporadas.

El actor Anthony Michael Hall dio vida en la pequeña pantalla al profesor Johnny Smith, protagonista de la inquietante novela ‘La Zona Muerta’. Tras despertar de un largo estado de coma, Smith descubre que tiene poderes especiales, como la habilidad de ver el futuro. Por el momento, se trata de la serie más extensa de cuantas han adaptado la obra de Stephen King, con seis temporadas a sus espaldas.

Lo peor de Stephen King

La Cúpula

La Cúpula cuenta con una premisa de lo más atractiva.

La novela homónima sitúa al lector en la pequeña localidad de Chester’s Mill, aislada del resto del mundo por un campo de fuerza invisible. A pesar de contar con una interesante y original premisa, el argumento de la serie de televisión carecía del terror característico de la obra de King. Empujando al espectador al más absoluto aburrimiento.

Los Chicos del Maíz

Los Chicos del Maíz también posee su propia versión cinematográfica.

En esta ocasión, la versión corresponde a la colección de cuentos ‘El umbral de la noche’. Este libro de relatos cortos incluye en su interior ‘Los chicos del maíz’, una de las historias más recurrentes del escritor. En ella, un matrimonio en crisis topa con una comunidad rural que esconde un terrible secreto. La ficción aportó pequeñas desviaciones adaptativas que terminaron por eliminar la propia esencia de la obra original.

Un saco de huesos

Ni siquiera un reparto estelar consiguió levantar la adaptación de ‘Saco de huesos’.

Bajo el título La maldición de Dark Lane, la novela ‘Un saco de huesos’ llegó a la pequeña pantalla con Pierce Brosnan, Melissa George y Jason Priestley a la cabeza. La miniserie descubre al espectador la diabólica maldición que persigue al escritor Mike Noonan, afectado por el reciente fallecimiento de su esposa. A pesar de la increíble acogida del libro, la serie fue presentada como un conjunto de clichés sacados del cine de fantasmas más insípido. Ni las eficaces interpretaciones del reparto consiguieron levantar una de las adaptaciones más desastrosas del genio del terror.