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Tratar los síntomas de la gripe desde su inicio ayuda a reducir los contagios

La tasa de atención primaria por gripe se ha incrementado más de un 542.67 % en las últimas tres semanas. Por esto es importante tratar los síntomas de la gripe desde inicio para que no se expanda y pueda contagiar a más personas.

Los expertos recomiendan extremar las medidas de prevención y tratar los síntomas desde su aparición para evitar complicaciones y reducir los contagios.

Estamos en plena ola de gripe y otros virus respiratorios, y según los expertos, es posible que tardemos algunas semanas en llegar al pico para que entonces empiecen a bajar los contagios. Como consecuencia, hay cierta saturación en los centros de atención primaria y en hospitales.

La gripe ha alcanzado ya valores epidémicos con 438,3 casos por cada 100.000 habitantes1. Esta cifra supone un aumento del 542.67% en comparación con los 68,2 registrados en el informe del Instituto de Salud Carlos III del pasado 10 de diciembre.

“La gripe, fundamentalmente la de tipo A, está circulando a niveles similares a los de antes de la pandemia, en un contexto de convivencia con el Covid y el VRS, pero también con otros rinovirus o adenovirus como los que causan el resfriado común, que no son tan incapacitantes, pero presentan síntomas comunes a todos ellos”, afirma Estanislao Nistal, Doctor en Virología, investigador y profesor de Microbiología en la Facultad de Farmacia de la Universidad CEU San Pablo.

Por qué tratar los síntomas de la gripe desde su inicio

Tanto médicos como investigadores creen que controlar los síntomas de la gripe desde un inicio ayuda a evitar complicaciones y a eliminar cuanto antes el virus de nuestro cuerpo.

Recomendaciones

“Estamos en unos días críticos, con cifras muy altas de contagios y con la vuelta a las oficinas y a las clases, por lo que la evolución de los contagios va a depender, entre otros factores, del comportamiento y la responsabilidad de la población”, añade el experto.

Cómo hacer frente a la gripe antes los primeros síntomas

Qué síntomas tenemos

Tanto los virus de la gripe, como la Covid y otros virus respiratorios comparten algunos de sus síntomas más habituales, como la congestión nasal, el malestar general, la tos, el decaimiento, el dolor o la fiebre.

Ahora bien, hay otros que realmente se diferencian y que hace que no hablemos de lo mismo. Y es lo que permite que podamos saber si se trata de una gripe o de una Covid por ejemplo.

Clínica Universidad de Navarra nombra los siguientes:

Según Frenadol, para poder paliar estos efectos, tenemos a nuestro alcance diferentes medicamentos que pueden tomarse de manera independiente o combinados entre sí para atajar estos síntomas, pero no son suficiente para abordar de una manera eficaz todos ellos. Siempre es mejor que sea el medico el que nos pueda recomendar qué tomar en cada momento. La automedicación no es nada buena.

Los compuestos para aliviar los síntomas de la gripe y el resfriado, como los medicamentos antigripales, ofrecen una combinación de principios activos. Clínica Universidad de Navarra establece que los medicamentos antivirales funcionan mejor si se comienzan a tomar inmediatamente después de que la persona enferme (dentro de los dos días después del inicio de la enfermedad).

Entre los diversos medicamentos que podemos tomar para hacer frente a estos síntomas que suelen ser comunes en invierno, están el paracetamol, indicado para tratar el dolor y la fiebre; el dextrometorfano, eficaz contra la tos; la clorfenamina, para reducir la secreción nasal y los estornudos; la cafeína, que nos ayuda a combatir el decaimiento; y la vitamina C, que favorece la reparación de los tejidos.

A pesar de que los expertos recomiendan tratar los síntomas desde el momento de su aparición para evitar complicaciones, según un estudio de Kantar para Kenvue, el 54,3% de los encuestados no toma ninguna medida cuando aparecen los primeros síntomas y un 40,2% solo recurre a medicamentos antigripales cuando los síntomas empeoran.

Complicaciones de la gripe

Clínica Universidad de Navarra nombra que la más común es la neumonía gripal, así como las sobreinfecciones del tracto respiratorio por otros gérmenes, fundamentalmente bacterias.

Suelen ser más frecuentes y severas en enfermos con alteraciones crónicas cardiacas, respiratorias, renales y otras. Hay que ser precavido y ver entonces de qué forma paliar sus efectos.