Qué es el SIBO: síntomas, tratamiento, cómo es la prueba y qué dieta debes seguir

El bienestar del organismo requiere de diferentes acciones que deben realizarse a consciencia con regularidad para prevenir malestares físicos. La práctica de actividad física es otro hábito para fortalecer todos los sistemas y lograr un estilo de vida saludable, así cómo también un descanso regular de entre 7 y 9 horas para reponer las energías que se utilizan durante el día. Una de las consultas más frecuentes que se realizan muchas personas al asistir a un control médico es qué es el SIBO o sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado: cuáles son los síntomas, tratamientos y qué dieta es recomendable realizar.

El Hospital Clínic Barcelona explica que el sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado o SIBO consiste en la presencia anormal de bacterias en el intestino delgado. En este sentido, mencionan que estas bacterias normalmente están presentes en mayores concentraciones en el colon. «Cuando se ingieren hidratos de carbono o azúcares, las bacterias hacen una reacción de fermentación en el mismo intestino delgado, que genera una cantidad excesiva de gases que provocan la sintomatología». A su vez, detallan que el intestino contiene de forma normal bacterias y otros microorganismos que viven en equilibrio en cantidades variables, lo que se conoce como microbiota. Sin embargo, cuando se rompe este equilibrio se produce una alteración de la microbiota intestinal o disbiosis.  

Qué es el SIBO

A tener en cuenta que la alteración de la microbiota puede sucederse por diferentes causas como alguna restricción dietética o por el uso de antibióticos. Un tipo de disbiosis es el SIBO, por eso es importante conocer los síntomas, cómo tratarlo y qué adaptaciones alimenticias se recomiendan ejecutar.

Según Clínica Mayo, el sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado se produce cuando hay un aumento anormal de toda la población bacteriana en el intestino delgado, en particular de los tipos de bacterias que no se encuentran comúnmente en esa parte del tubo digestivo.

Síntomas del SIBO

La Clínica Mayo identifica que entre los signos y síntomas de crecimiento excesivo de bacterias en el intestino delgado se incluyen: pérdida del apetito, dolor abdominal, náuseas, hinchazón, sensación incómoda de saciedad después de comer, diarrea, pérdida de peso involuntaria y malnutrición. También se registran situaciones de aumento de gases, acidez y estreñimiento.

Tratamiento para el SIBO

Desde el Hospital Universitario San Roque plantean que el tratamiento para el SIBO se centra en tres pilares fundamentales. Uno es tratar o modificar la causa directa e indirecta del SIBO, otro inducir la remisión y, el tercero, prevenir la recurrencia.

El primero consiste en identificar y abordar la causa subyacente del problema e implica tratar enfermedades subyacentes que contribuyan al SIBO, como enfermedades intestinales o trastornos de la motilidad intestinal.

El objetivo de inducir la reducción de los síntomas se busca mediante el uso de antibióticos específicos que ayudan a reducir el exceso de bacterias en el intestino delgado. «El tratamiento farmacológico se suele combinar con pautas de alimentación específica, como la dieta baja en FODMAP, que ayuda a reducir la sintomatología gastrointestinal», sostienen autoridades del hospital.

La prevención se lleva a cabo una vez que los síntomas han sido controlados, con el objetivo de mantener la remisión a largo plazo. Las medidas que favorecen la salud intestinal fortalecen la prevención y se centran en una dieta rica en prebióticos y probióticos.

Test de SIBO: en farmacias y en la Seguridad Social

En farmacias, está el test de aliento para el diagnóstico de sobrecrecimiento bacteriano. Isomed Pharma relata que es un test de aliento para adultos y niños mayores de 5 años con síntomas asociados al sobrecrecimiento microbiano intestinal, como flatulencias, meteorismo, distensión y/o dolor abdominal, etc.

Cada envase contiene: 1 sobre de lactitol monohidrato (10 g), 12 tubos de vidrio: 1 para la recogida de muestra BASAL y 11 para la recogida de muestras POST, 2 tubos flexibles, etiquetas identificativas.

No en todos los hospitales y centros médicos de la Seguridad Social se realiza este test. Consulta con tu médico. Quirón Salud relata que es un kit donde tomar la muestra de aliento para el test del SIBO en casa y, posteriormente, se analiza en uno de sus laboratorios especializados.

Dieta para el SIBO: qué no puedes comer

La dieta que se recomienda para quienes tienen SIBO se conoce como la dieta baja en FODMAPs. Se trata de oligosacáridos, disacáridos, monosacáridos y polioles fermentables, tipos de carbohidratos que las bacterias intestinales fermentan y producen gases que causan molestias digestivas en las personas con SIBO.

Por lo tanto, limitar el consumo de alimentos ricos en FODMAPs favorece a reducir los síntomas del SIBO en muchas personas. Entre los alimentos que se aconsejan limitar su consumo: manzanas, peras, sandías, cerezas, ajo, cebolla; brócoli, coliflor, coles de Bruselas, espárragos, cebollas, ajo; lentejas, garbanzos, frijoles; leche, queso, yogur; y edulcorantes artificiales como sorbitol, xilitol y manitol.

En este sentido, se propone llevar a cabo una dieta rica en fibra, que es importante para la salud intestinal en general y puede ayudar a aliviar algunos de los síntomas del SIBO, como el estreñimiento.

Los alimentos que se recomiendan son las frutas como plátanos, arándanos, fresas, naranjas; verduras y hortalizas que incluyan canónigos, espinacas, berros, zanahoria, calabaza; cereales integrales como avena, quinoa, espelta, trigo sarraceno, semillas de chía, lino y calabaza.